La discoteca contó con Paco Osuna y Laurent Garnier como principales reclamos de un aniversario muy especial para la familia de Copera tras toda la crisis generada por la pandemia

España como país rico en cultura que es, no podía ser menos en la música electrónica. Uno de los pilares que sostienen esta cultura del ocio nocturno en nuestro país es sin lugar a dudas Industrial Copera en Granada. Y no solo del ocio nocturno (donde lo encasillaríamos erróneamente), sino de la cultura musical en todos los aspectos, intentando darle el valor que se merece al elemento cultural de cada artista que pisa la sala granadina. Industrial Copera se ha ido reinventando con el paso de los años, cambiando de localización y adaptándose a la evolución social, llegando a crear uno de los puntos de referencia para el ocio musical ya no solo de Andalucía, sino de toda la península.

Industrial Copera celebrará su 30 aniversario con artistas de altísimo nivel

Y estamos de enhorabuena, porque esta legendaria sala está de celebración ya que cumple 30 años desde que se instaló en un polígono industrial en Armilla, que vio crecer a Industrial Copera hasta 2013 donde se tuvo que mudar a la localidad nazarí de La Zubia. Por su sala han pasado leyendas de la música y de todos los géneros como Richie Hawtin, Carl Cox, Mobb Deep, Paul Kalkbrenner, Enrique Bunbury, SFDK, Joris Voorn o La Fura Dels Baus entre muchísimos otros, un cartel que difícilmente es igualable por otras salas de nuestro país. Y todo ello respetando siempre la esencia de Granada y de negocio familiar, algo vital para ver a Industrial Copera en el lugar donde está actualmente.

Desde sus orígenes previos en el Hospitalet de Llobregat bajo el nombre de ‘Clandestino’, pasando por su mudanza hacia la bella ciudad andaluza hasta este fin de semana en el que han cumplido 30 años bajo el nombre de Industrial Copera, durante todos estos años el ingrediente principal ha sido la pasión y el cariño por las cosas bien hechas. Y lo hemos podido comprobar de primera mano el pasado sábado gracias a la invitación que nos ofrecieron para asistir a ver a Octave One (live) y al legendario Laurent Garnier con motivo del trigésimo aniversario. Así que os vamos a contar cómo vivimos desde dentro el cumpleaños de la mítica Industrial Copera.


Cabe destacar primero que este no era el único evento por esta fecha tan especial. Fieles a su gran oferta musical, Industrial Copera programó dos fines de semana increíbles además de la programación mensual ya de por sí muy potente con Vortex, concierto de la cantante Ptazta o finalizando con una doble fecha del sevillano Wade. Empezando el día previo a nuestra aventura con el concierto del rapero Cruz Cafuné y posteriormente con el showcase de Mindshake, el sello de Paco Osuna. Ambos tuvieron un lleno absoluto y una gran acogida, incluso nos enteramos al día siguiente que el rapero canario se quedó un rato a disfrutar de la actuación del mítico DJ barcelonés.

industrial copera 30 aniversario

Eso fue el viernes y mientras que la sesión daba sus últimos coletazos, nosotros ya estábamos dirigiéndonos a la estación de Atocha rumbo a la preciosa ciudad que alberga La Alhambra. Una vez llegados a Granada y habiéndonos acomodado en nuestra habitación, procedimos a ir a comer con Jesús Carrilla, más conocido como Junior y actual director de Industrial Copera. Recién pusimos un pie en Granada, ya se respiraba un ambiente especial, como si la ciudad supiera que era una fecha importante para la cultura de la misma. Una ciudad que de otra cosa puede que no, pero de historia va bien servida.

Hablabas con los taxistas y te contaban sus anécdotas con la sala durante el tiempo que la han visto crecer. También los camareros del acogedor restaurante donde pudimos probar las deliciosas habas y alcachofas de Huétor Vega te hacían ver el significado que tiene el club para la ciudad, lo que han vivido cuando han pisado esa mítica sala y los buenos momentos que todavía al recordarlos se les asoma una sonrisa de oreja a oreja. Industrial Copera es parte importante de Granada y el cariño que le tiene la gente muestra que las cosas se han hecho muy bien desde sus inicios hasta día de hoy, porque celebrar 30 años de historia no es una nimiedad.

“Nuestro éxito, lo que nos ha dado una salud de hierro a lo largo de estas tres décadas, reside en una dedicación absoluta por hacer lo que nos gusta con profundo amor y respeto por ello. (…) Echo la vista atrás y me siento orgulloso del trabajo de mi equipo.” indica Junior acerca de todo lo que conllevan estos 30 años de historia de Industrial Copera en Granada.

La escena andaluza: Industrial Copera

Tras el banquete y ver las vistas de la preciosa ciudad de Granada, nos dirigimos sin más dilación a Industrial Copera atajando por los caminos entre los huertos de la zona. Durante el trayecto Junior ya nos dijo que una de las cosas más especiales de Industrial Copera es que la vegetación autóctona se fundía con la sala y lo pudimos comprobar al llegar al club como las enredaderas naturales estaban creciendo por toda la fachada, dándole un toque muy especial. Entramos sobre las 16:30 al club y mientras que todos los trabajadores ultimaban los detalles para el evento del día, nosotros aprovechamos para hacer un pequeño tour y conocer la sala más en profundidad antes de la fiesta.

Se acercaban las 18:00 de la tarde y todo estaba listo para que El Jardín abriera sus puertas con un set especial del barcelonés Ángel Molina, cuya música ambient con posteriores toques de break se fundía a las mil maravillas con la vegetación de la terraza mientras degustábamos un coctel especial de la mano del sumiller granadino Curro Marín, que presentaba su nuevo Vermú de Garage by Curro. Muy rico por cierto, fuimos los primeros en probarlo y los últimos para cerrar el círculo mientras Ylia nos encandilaba con el electro que abandera desde que empezó en la industria bien jovencita.

Ángel Molina e Ylia

Y por fin llegó uno de los platos fuertes de la noche. Los hermanos Lenny y Lawrence Burden, más conocidos por todos como Octave One, se apoderaron de la cabina de El Jardín a las nueve y media de la noche y empezaron a demostrar por qué son uno de los dúos más consagrados en el mundo del techno. Ya desde que Ylia estaba terminando su set, ellos estaban súper concentrados entrando en la dinámica musical agitando la cabeza al ritmo del beat que sonaba por los altavoces, para luego empezar a trastear con la decena de artilugios que había en la mesa preparados desde primera hora de la tarde exclusivamente para su live.

Los estadounidenses, estandartes del Detroit Techno (cuna de la mayoría de música electrónica actual), empezaron su set con una terraza a rebosar y tardaron literalmente dos compases en que todo el público estuviera a sus pies. La experiencia es un factor diferencial a la hora de ponerte detrás de una cabina y actuar en frente de muchas personas, y Octave One están bien curtidos. Dos horas de puro espectáculo en las que te quedabas obnubilado frente a lo que eran capaces de hacer los hermanos Burden. Como bien decía la persona que tuve al lado durante un rato en la actuación, “olé” y “toma ahí” son dos expresiones que perfectamente resumen lo que se vivió en la pista.

Octave One

No pudo faltar su legendario ‘Blackwater’ para poner fin a dos horas de auténtico gozo por parte del público, el cual le devolvió el amor a los artistas en forma de ovación para dar paso de nuevo a Ylia, la cual tenía tarea complicada de mantener el mood de la pista pero que lo consiguió con creces hasta la medianoche. Ahí ya abrió la sala principal de Industrial Copera tras el concierto homenaje a Led Zeppelin que se produjo dentro durante la tarde, y el público se dividió entre las dos zonas donde los dos DJ residentes, Álvaro Sánchez y el propio Junior, continuaron con la fiesta.

Junior puso el broche final a El Jardín con un set muy enérgico para aquellos que se quedaron aprovechando de la gran temperatura que hacía a esa hora en la ciudad nazarí, mientras que Álvaro Sánchez se encargó de la difícil e importante misión de hacer el warm up a una leyenda como Laurent Garnier. Durante dos horas el DJ residente fue calentando la pista y a medida que se acercaba el momento de que el francés se hiciera cargo de los platos, más gente se fue acercando a la main room donde Álvaro cumplió sobradamente con su cometido dejando la pista a pedir de boca para el DJ nacido en la periferia de París.

Laurent Garnier y Álvaro Sánchez

A las 2 de la noche y con la cabina de El Jardín ya cerrada, comenzó el set del francés con todo el público deseoso de verle en persona de nuevo en Industrial Copera. Garnier decidió colocar su cabina a la altura de la pista en vez de en la plataforma donde suelen actuar todos los artistas para así sentir más de cerca al público, el cual vibró con su savoir faire. Garnier tiró de galones y mucha clase a los platos, sobre todo demostrando el gran criterio musical que avalan más de 30 años de carrera.

Todo calificativo que podamos usar con Laurent Garnier se va a quedar corto, una eminencia de la música electrónica que una vez más, volvió a demostrar durante tres horas que la jerarquía tiene un peso adicional en cabina que consigue crear un aura el cual el público asistente solo puede contemplar y deleitar cada segundo musical de su set. A las cinco de la mañana y con la sala todavía mostrando un ambiente espectacular, Ángel Molina volvió a subirse a la cabina de Industrial Copera pero esta vez con un tono muy distinto al que había mostrado durante la tarde.

Laurent Garnier

El catalán, que se había ido a descansar lógicamente para estar fresco para la sesión de cierre, le tomó el relevo a la eminencia francesa para dar un plus extra de energía a los asistentes que se mantenían en la sala a modo de TECHNO en mayúsculas. No podía haber un mejor cierre a una noche tan especial para la familia de Industrial Copera como era la del trigésimo aniversario. Un evento donde todo salió a las mil maravillas y se volvió a demostrar por qué este club situado en Granada es de los mejores de toda España.

Además, haciendo gala de su nueva política de espacio de ocio seguro libre de fobias y discriminación, no se anduvieron con dudas a la hora de expulsar a un grupo de personas las cuales se rieron y realizaron comentarios transfóbicos hacia unas bailarinas. Una iniciativa que aplaudimos y apoyamos desde aquí porque la pista tiene que ser nuestro refugio donde todos somos iguales y no hay cabida a la discriminación. Otra muestra más de por qué Industrial Copera es sin lugar a dudas un club referente en toda la escena nacional e internacional.

Con cansancio acumulado pero habiendo disfrutado de una noche súper especial, volvimos al día siguiente a Madrid todavía recordando lo mágica que fue la noche anterior. Solo queda dar las gracias a todo el equipo de Industrial Copera, desde Junior a Yeyes, Álvaro, Mariajo, Carmen y todos y cada uno de los trabajadores por hacernos sentir parte de su familia desde el primer momento. También a los compañeros de Beatburguer, Vicious, Acero y DJ Mag FR por haber hecho tal piña en tan poco tiempo, y sobre todo a Pat Quinteiro por haber hecho todo esto posible. ¡Recordad que el aniversario sigue este sábado con la visita de Pendulum! Y esperamos ver celebrar a Industrial Copera muchísimos años más. #Yobailoencopera

Óscar Ruiz
Se podría decir que los auriculares ya son una extensión más de mi cuerpo. Un periodista al que le encanta viajar, ver Netflix hasta las tantas, y por supuesto la música. | "It's all about house music"