Con 25 años de recorrido a las espaldas, Aquasella se ha convertido en uno de los festivales de referencia de nuestro país, la meca nacional que cualquier amante del techno debería visitar al menos una vez en la vida (si acaso esto posible, porque quien pisa y descubre la magia de El Prau, repite). Un enclave natural incomparable, una programación con los nombres más destacados del género y un ambiente de comunión plena entre los asistentes convierten al festival asturiano en uno de los más especiales del circuito.

En este nuevo capítulo de nuestra sección ‘La Otra Escena’ hemos podido entrevistar a Luis Ibáñez Esteban Pola, dos generaciones al mando de Aquasella a lo largo de estos años. Hablamos con ellos sobre su recorrido, esta nueva edición, la esencia AQS, su relación con la naturaleza y mucho más. ¡Vamos allá!

 Aquasella 2022: Noticias, cartel y entradas


WOLOLO SOUND: ¡Hola, Luis y Esteban! Antes de comenzar nos gustaría daros las gracias por sacar un rato para charlar con nosotros, es un placer teneros en nuestra sección de ‘La Otra Escena’. Para quien no os conozca, ¿cuál es vuestro vínculo con Aquasella?

AQUASELLA: Luis Ibáñez es el fundador del festival, además de CEO. Esteban Pola ostenta el puesto también de CEO de Aquasella, junto con otros socios.


WS: Desde hace unos años, vemos una amplia oferta de festivales tanto a nivel nacional como internacional, que además comparten una línea musical similar con Aquasella. ¿Qué pensáis que hace que Aquasella sea especial con respecto al resto y cómo afrontáis esta competencia que cada vez es mayor? 

AQS: El entorno natural donde se desarrolla el festival y el habernos mantenido fieles a una línea musical durante 25 años, creo que hacen de AQS un evento único. Un festival que ha sabido mantenerse fiel a un estilo específico dentro del sonido techno, continuando una línea concreta y desarrollando un carácter sólido en un panorama que se ha transformado mucho desde la primera edición de Aquasella.


WS: Tras un parón sin precedentes, nos encontramos por fin a falta de apenas un par de meses para el festival, que además será la celebración de su 25 aniversario. ¿Cómo habéis vivido estos dos años y cómo encaráis esta edición de 2022?

AQS: Como ha sucedido a otros eventos y festivales de estas características, han sido 2 años muy duros, de aplazamientos, de mucho trabajo sin recompensa, pero que nos ha servido para darle la vuelta a muchas cosas para así poder hacer una 25 edición como se merece. Ha sido una situación difícil que nos ha permitido evaluar muchos aspectos, y esperamos que el regreso esta edición cumpla todas las expectativas del público y de nosotros como organización.


WS: Una de las novedades de este año es la incorporación de un nuevo escenario con takeovers a cargo de otras promotoras como NOX o Blackworks ¿De dónde surge esa idea? 

AQS: Este tipo de acciones, creando sinergias con otros proyectos que están trabajando en una línea que nos parece acorde con AQS, consigue crear redes que refuerzan a ambas partes. Una línea que recuperamos en este 25 aniversario y que  seguiremos explorando.


WS: Está claro que a lo largo de estos 25 años muchas cosas han cambiado y el festival no ha dejado de crecer pero hay cosas que aun perviven. ¿Qué queda de aquel Aquasella de 1997 que aun podamos ver o sentir en el de 2022?

AQS: El sentimiento original de creación del festival pervive en una línea que se ha marcado en las primeras ediciones y a las que Aquasella ha permanecido fiel. El panorama electrónico y de festivales ha variado mucho en estos 25 años, y algunos más con la pandemia. Aquasella ha alcanzado una profesionalidad que se ha ido adquiriendo al sumar las ediciones, pero la pasión por la música es la misma que al inicio.


WS: A lo largo de vuestra historia habéis conseguido que grandes nombres como Jeff Mills, Carl Cox o Paul Kalkbrenner pisen el prau ¿Cuál es el artista con el que más soñabais y por fin conseguisteis contratar o el que más difícil fue? 

L: La verdad es que hasta que Laurent Garnier actuó en 2018 hubo varios intentos que por diferentes razones se torcieron al final. Traer a The Blessed Madonna este 2022 también trajo algún quebradero de cabeza, pero finalmente se consiguió.


WS: ¿Y alguno que os quede pendiente? 

E: Creo que en Aquasella han estado todxs los artistas que hemos buscado en cada momento, aunque por ejemplo, nos hubiera gustado haber tenido a Frankie Knuckles por el Prau. Tenemos alguno más pendiente, pero no lo vamos a desvelar porque serán sorpresa para 2023 (risas).


WS: ¿Pensáis que ya es difícil sorprender al público en este sentido?

AQS: Sí es difícil sorprender hoy en día, porque con el gran número de eventos que existen casi siempre vas a poder ver a tus artistas favoritos en alguno de ellos. Lo más difícil es reunir a varios de ellos para constituir un line up de garantías y que tenga ese punto de sorpresa y expectación para el público. Cada edición de Aquasella es diferente, y buscamos ofrecer unos niveles de calidad tanto en el line up como en los servicios del festival.


WS: Mucha gente no es consciente de todo el trabajo que hay detrás de la organización de un festival. ¿Cómo es el trabajo de preparación de Aquasella? ¿Cuánto tiempo os lleva cerrar el cartel, por ejemplo?

AQS: Es un trabajo que dura casi todo el año, ya que hasta última hora puede haber variaciones en ese cartel. En estos momentos ya estamos trabajando en AQS 2023.


WS: Muchas veces en este tipo de proyectos el trabajo consiste en “ensayo y error”, sobre todo al principio. ¿Recordáis en especial algún gran error que, viéndolo con perspectiva, se convirtió en un gran aprendizaje?

AQS: Los recuerdos se amontonan después de tantas ediciones. Cada una de las ediciones que han pasado nos han dejado un aprendizaje tras ellas.


WS: ¿Y algún momento que os emocione o al que guardéis especial cariño?

L: La sesión techno que se marcó Richie Hawtin, creo que en 2006, cuando vino por primera vez a Aquasella. Recuerdo que vino él solo, sin tour manager ni nada. Inolvidable.


WS: Cada año podemos ver un mayor número de artistas femeninas en vuestro cartel. ¿Es algo que hagáis a conciencia a la hora de programar o ha ido surgiendo de manera orgánica a medida que cada vez vemos mayor presencia de artistas femeninas en la escena en general?

AQS: No es algo buscado intencionadamente, desde luego o al menos no para intentar marcar una cuota obligada, aunque somos conscientes de la importancia de la visibilidad. Sin embargo, en los últimos años se han ido incorporando artistas femeninas de altísimo nivel a la escena internacional y nacional en AQS nos hacemos eco de esta tendencia que ha hecho crecer el número de artistas femeninas en el line up. El primer criterio para la incorporación en el line up de AQS en el que nos fijamos es el nivel del artista en cada momento, independientemente de su género.


WS: De igual manera, a lo largo de estos 25 años también ha ido incrementando la sensibilidad con respecto a cuestiones medioambientales. Teniendo en cuenta que Aquasella se sitúa en un entorno natural privilegiado y que esto también se ha convertido en un icono del festival, ¿qué desafíos os supone esto? ¿En algún momento esto os ha supuesto un problema con las autoridades o la población local?

AQS: Desde la organización siempre nos preocupamos de mantener limpio todo el recinto, además del cauce del Sella, para dejarlo todo igual e incluso mejor cuando acaba el festival. Tenemos para ello un plan de sostenibilidad que vamos adaptando año tras año, y que entre otras cosas se encarga de llevar una gestión de residuos eficiente y sostenible para minimizar el impacto en el entorno, la reducción de consumos de plástico, eficiencia energética, reducción de huella de carbono.. Somos muy conscientes de que nuestro recinto es algo que nos hace únicos, por lo que somos los más interesados en que este impecable año tras año.


WS: Y por último, si tuvieses que resumir lo que es Aquasella para vosotros en tres palabras, ¿cuáles serían?

AQS: Techno, fiesta y naturaleza.

Mil gracias de nuevo por atendernos, ¡nos vemos en El Prau!

Cris Pascual
Escucho música desde que tengo uso de razón y me lo bailo (casi) todo. En ocasiones veo BPMs.