El productor británico demostró que uno de los géneros más populares de Reino Unido también tiene cabida en Madrid en la que fue nuestra primera visita a la nueva temporada de Antídoto Club
Aunque este verano hayamos tenido pequeñas dosis de Antídoto Club como la visita de Kaytranada con el afterparty oficial del concierto de The Weeknd, o su stage en el festival Fan Futura con artistas como FS Green, Rusowsky o Nusar3000, ya era momento de volver a la rutina y visitar otra vez la Sala Moondance en el inicio de temporada 23/24 de una de las marcas de ocio nocturno dominantes en la capital. Para ello nos dejamos caer este pasado jueves en la green booth para ver a un joven artista que empieza a despuntar en la escena británica del sonido garage y breaks como es Ghoulish.
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Se notaba que los jóvenes, tanto madrileños como de otras partes del mundo que vienen a la capital en programas de intercambio universitarios, tenían ganas de que Antídoto Club regresara con su programación mensual. La sala estaba a rebosar desde el momento en el que entramos de gente ataviada con sus mejores outfits de ropa urbana, como es ya habitual en esta sesión que siempre mezcla las tendencias musicales y de moda de las nuevas generaciones. Yosef estaba al mando en cabina con un set muy variado como suele hacer el headhoncho de Antídoto Club, moviéndose entre remezclas aceleradas de hits de reggaeton, rap, garage o sonidos techno.
Tras él, llegó el turno de Diego Armando. Otra de las caras que conforman Antídoto Club entre bastidores y que poco a poco va iniciando su camino en el mundo del DJ y que tiró del repertorio de seguridad con varios de los temas más clásicos de la sesión que mantuvieron al público activado antes de que el británico Ghoulish, el cual ya andaba por ahí y con el que pudimos charlar amistosamente antes de la sesión, tomara el control de la green booth. Rara vez es cuando el artista invitado cierra una de las fiestas de Antídoto a las que hemos acudido, pero Ghoulish se encargó de este slot siempre especial para todo artista.
La promesa británica, recién firmado por el management de Skream, realizó un set tremendamente divertido y dinámico que mantuvo al público bailando durante las casi dos horas de sesión con un género musical que, aunque sea triste decirlo, no triunfa entre el público español. Esto demuestra el poder de congregación que tiene Antídoto Club para atraer a público diverso. alejado de géneros electrónicos más minoritarios, y aun así que le den una oportunidad y disfruten del artista en cuestión. Una responsabilidad que tiene la marca de abrir horizontes y descubrir nueva música al joven público madrileño y que entiende a la perfección.
Ghoulish, como no podía ser de otra forma, se aventuró con varios de sus originales o remezclas como ‘The Underground Way’ o el remix al ‘On A Mission’ de Katy B, un clásico de la música británica. También puso a lo largo de su set remezclas de varias canciones de trap para que el público más asiduo a la sesión de los jueves de la Sala Moondance siguiera palpando ese toque Antídoto o canciones míticas como el ‘Music Sounds Better With You’ de Stardust.
En un abrir de ojos llegamos al final, con un Ghoulish siempre agradecido y cercano con el público durante todo el rato que estuvo en cabina y que clausuró su gran debut en España con nada más y nada menos que ‘L’Amour Toujours’ de Gigi D’Agostino, una de las canciones más legendarias de la música electrónica que habréis bailado cientos de veces. Se encendieron las luces de la sala, indicando a los presentes que teníamos que enfilar la puerta hacia una tormenta que arreciaba Madrid y de la que no nos pudimos librar, pero que no nos privó de la fantástica noche que vivimos en nuestro regreso a Antídoto Club.
