La famosa discoteca ubicada en Fraga, es conocida por ser una de las instituciones más emblemáticas de la escena de la música electrónica en el país. Denominada como ‘La catedral del techno’, fue fundada en 1942, y ha mantenido su estatus como uno de los lugares más icónicos para los amantes de la música electrónica, convirtiéndose en un verdadero templo de la cultura underground. A lo largo de los años, este club ha sido testigo de la evolución de la música electrónica y ha acogido a numerosos artistas nacionales e internacionales, así como a una comunidad de seguidores fieles de la esencia Florida 135.
Es importante destacar el papel de este club en la escena de la música electrónica como un espacio que ha contribuido a la difusión y promoción de géneros vanguardistas. Además, su longevidad, nada más y nada menos que 81 años, demuestra su capacidad para adaptarse a lo largo de la historia y seguir siendo relevante en un panorama musical en constante cambio. Gran culpa de esto tiene la familia Arnau, propietaria del club desde sus inicios, la cual ha sabido manejar a la perfección esta gigante sala que tantas alegrías nos ha dado a los amantes de la música electrónica.
Este 81 aniversario prometía desde el inicio, contaba con un cartel de primer nivel con nombres como: Andrés Campo, Héctor Oaks, Indira Paganotto, Víctor Fernández y Aida Arko. Días antes del evento ya se sentía el calor de la gente en redes sociales y se empezaba a notar la magia que todos los aniversarios de Florida tienen. Los fanáticos de Florida estaban ansiosos por asistir al evento y esto se plasmó en un rápido Sold Out, a pesar de tener dos días de aniversario en los que elegir, coincidiendo con Blackworks el sábado anterior.
La noche comenzó a las 12 en punto con un Víctor Fernández haciendo gala de su gran habilidad para hacer warm ups y con su característico estilo que te sumerge en un constante ritmo de baile. Seguidamente venía Aida Arko, la artista austriaca que poco a poco va despuntando cada vez más en la escena internacional. La DJ nacida en Vienna puso toda la carne en el asador desde el primer momento, poniendo tracks conocidos de la escena hard techno del momento, hizo enloquecer a los seguidores más fieles de este estilo que está tan de moda.
Se acercaban las 3 de la mañana, e Indira Paganotto empezó a prepararse en cabina en lo que se escuchaba el ruido ensordecedor del público gritando su nombre. La artista española nos brindó un set espectacular con tracks de su particular estilo psytrance, que no deja indiferente a nadie. Se ganó el amor de los asistentes derrochando carisma durante todo el evento y reclutando a parte del público en su conocido equipo de warriors.
El broche final, cayó en manos del esperado b2b entre Andrés Campo y Héctor Oaks, nada más y nada menos que a vinilo. El que se ha puesto delante de una mesa de mezclas alguna vez, sabe la dificultad que acarrea una sesión a vinilo y aún más siendo un b2b. Para sorpresa de nadie, estos dos titanes lo bordaron. Sonaron tracks verdaderamente old school, mezclando estilos como el techno, hard trance, remember… Héctor acostumbrado a tocar en vinilo sonidos de antaño y Andrés con su pasado como DJ Kuki en Coliseum, culminaron en una fusión perfecta, como si de una pieza de puzle se tratara. Para cerrar nos deleitaron con el famoso tema ‘Alloy Mental – Fire’, un clásico para cerrar la catedral.
Dicho esto, no queda otra que agradecer otro año más a la familia de Florida 135 por su trabajo y dedicación, manteniendo vivo un club que es historia de nuestro país. Florida tiene una magia especial, y solo los que han asistido a ella lo saben.
