Aquasella es desde hace más de dos décadas uno de los festivales con más nombre del país. La mejor música underground que han visto nuestros ojos ha desfilado por este evento año tras año, con carteles que escasas promotoras españolas pueden permitirse en la actualidad. El festival asturiano coge una nueva dimensión si hablas sobre él con una persona del noroeste de España, donde está considerado la verdadera e inimitable meca del techno. En la quinta entrega de esta temporada de ‘La Otra Escena’ hemos podido entrevistar a Esteban Pola, uno de los artífices principales del festival Aquasella. En esta extensa charla Esteban nos habla sobre muchos aspectos de la producción de un festival de gran formato, su envidiable ubicación o las muchas anécdotas que rodean al evento.


WS – Muchas gracias por atender a Wololo Sound en esta exclusiva entrevista para nuestra sección ‘La Otra Escena’. Prácticamente todo el mundo en España conoce Aquasella, pero seguramente muchos aún no ha visitado el “prau”. ¿Cómo venderías un evento como Aquasella a quienes aún no hayan asistido?

Esteban – Encantado de poder atenderos. A aquellxs que nunca han estado en nuestro Festival, les diría que Aquasella es un evento único al que cualquier amante de la música electrónica debería de asistir al menos una vez en la vida.

En España, somos el festival exclusivamente de música electrónica con más ediciones a nuestras espaldas, único por varias razones: desde una ubicación increíble, rodeados de naturaleza, con los Picos de Europa y el río Sella como telón de fondo, hasta una programación musical, siempre centrada en el techno, tocando desde lo más clásico hasta las tendencias más innovadoras y vanguardistas, en donde contamos con un público totalmente entregado, donde el “buen rollo” es lo principal… todo esto y mucho más hace de AQS una experiencia que a quien la prueba, la repite.


WS – Antes de entrar en detalles sobre el evento en si, queremos preguntarte por lo que significa a nivel económico un evento de gran formato como este. ¿Está al alcance de cualquier empresario o se necesita “algo más”? ¿Tienes conocimientos amplios sobre la escena underground o cuentas con varios asesores para conformar el cartel?

Esteban – Aquasella, como cualquier otro festival musical, es un proyecto complejo, que se ejecuta durante 4 días concretos al año, pero en el que hay un gran trabajo grupal durante 365 días al año. Está claro que no es un proyecto empresarial al uso: para su desarrollo se necesita una implicación extra, además de un amor y cuidado especial que otro tipo de proyectos quizá no requieren.

Para la configuración del cartel tenemos un equipo de asesores artísticos que están al tanto de las nuevas propuestas en la escena nacional e internacional, sin olvidarse de los grandes nombres ya contrastados, para así configurar un line up de garantía en cada edición. Pese a ello, desde la dirección del festival, como amantes de la música que somos, también nos gusta aportar nuestro “granito de arena”.


WS – Hay dos cosas sobre Aquasella que llaman pronto la atención. La primera sería la longevidad del evento, que este año cumpliría 24 ediciones. ¿Cómo se consigue llenar un festival durante tanto tiempo? ¿Cómo han cambiado los line-up y los asistentes al evento en estos años?

Esteban – En primer lugar, Aquasella va a hacer su edición 24 gracias a un público fiel y agradecido, que año tras año repite. Lógicamente en estos 24 años el público se va renovando, aunque contamos desde público que no se ha perdido ninguna edición, hasta jóvenes que han venido por primera vez con sus padres. Por otra parte, el mantener la misma esencia desde nuestros inicios es algo que a la gente agradece y que les hace venir.

Nuestros line-up han ido evolucionando a lo largo de estos años: desde nuestra primera edición, en 1997, que fue de un solo día, y se componía de 10 artistas asturianos y madrileños a la que asistieron unas 1000 personas, hasta la última edición de 2019, la número 23, que contó con más de 50 artistas de todo el mundo y a la que asistieron unas 40.000 personas.

Esta evolución del formato (desde un solo día hasta cuatro que hacemos actualmente), y con todos los artistas que han estado a lo largo de estos años se puede ver, con sus carteles originales, en nuestra web. De la misma forma, el público también ha evolucionado, desde un público casi exclusivamente asociado a la escena techno en las primeras ediciones, hasta un público más generalista, amante de la música electrónica, pero no exclusivamente del género underground.


WS – El segundo dato reseñable sobre este evento es su ubicación, entre montañas y a la orilla del rio Sella. ¿Es este el gran encanto que tiene el festival? ¿Cambiaríais de ubicación para hacerlo más grande o cómodo, o esta siempre será vuestra seña?

Esteban – Cómo te comenté antes, “El Prau” y su entorno es factor clave en Aquasella y uno de nuestros principales alicientes. No tenemos ninguna intención de movernos de él.


WS – Asturias siempre ha presumido de tener una gran escena y un gran público en lo que a techno se refiere. ¿Cuánta culpa crees que tiene Aquasella en esto? ¿Os veis de alguna manera impulsores de un pequeño movimiento como el de la Ruta Del Bakalao valenciana?

Esteban – Aquasella fue el primer festival exclusivamente de música electrónica en el norte de España, por lo que en parte somos “culpables” de la afición a esta música en la región, aunque el germen de toda esta escena podemos decir que fue la discoteca La Real (Oviedo), abierta en 1991, que fue el primer club especializado en música electrónica el norte de España y llegó a ser referente del techno a nivel nacional e internacional durante años.



WS – Mucha gente sigue viendo este tipo de eventos de corte underground/techno como un sitio donde la gente no va a escuchar música si no a “otra cosa”. ¿Qué les dirías a los que siguen mezclando música techno y el mundo de la droga en la misma frase?

Esteban – Desafortunadamente ese estigma es muy difícil de eliminar, aunque para mí no deja de ser un tópico: la mayoría de la gente va a estos eventos a escuchar buena música, a bailar, a pasárselo bien y disfrutar. No creo que sea muy diferente a los eventos donde se escucha rock, reggae o pop..


WS – En Aquasella solemos tener música hasta las 12:00 de la mañana. ¿Cómo viven los asistentes y sobretodo los djs este hecho? Para quien no haya estado, ¿podrías intentar describir con palabras lo que significa un cierre en Aquasella?

Esteban – El “mañaneo” es otra de las cosas que nos distingue de la mayoría del resto de festivales, santo y seña de AQS. El poder amanecer bailando en el “prau”, bien sea con sol, “orbayando” o con niebla, hasta el mediodía es una experiencia única que quien la ha vivido difícilmente olvidará.


WS – Aunque terminar a las 12:00 está muy bien, por ejemplo en Berlín las salas tienen licencias 24 horas. ¿Crees que algo así sería beneficioso en los clubes y festivales españoles?

Esteban – La libertad de horarios puede estar bien, no cabe duda. Hasta ahora las salas y eventos han tenido casi exclusivamente horarios nocturnos, aunque cada vez se están poniendo más de moda los eventos diurnos, con formatos tipo “brunch” o tardeos, como ya ocurre en muchos lugares de Europa. Creo que esa tendencia también calará en España, aunque ya sabemos que a nivel de las administraciones locales, regionales, etc.. será complicado.


WS – Aquasella ha bailado de fecha bastantes veces en los últimos años, aunque ahora parece haberse asentado en el mes de agosto. En agosto tenemos otros grandes festivales como Dreambeach, Medusa, ahora Monegros… ¿Cómo habéis sobrellevado que en los últimos años los macro festivales se hayan multiplicado?

Esteban – La competencia siempre es buena: te hace estar alerta y siempre preparado y abierto a nuevos retos. Es verdad que en estos últimos años el número de festivales se ha incrementado mucho y al aumentar la oferta para el público, se reparte mucho la asistencia a los eventos. Sin embargo, AQS tiene un público fiel que con su “boca a boca” va haciendo que gente nueva se interese por el festival y se vaya incorporando al equipo de “aquaselleros”, por lo que año tras año vamos ganando público.


WS – Carl Cox, Richie Hawtin, Carola, Mulero, Ben Sims, Jeff Mills… Aquasella ha acogido (en varias ocasiones) a lo mejor y más veterano de la escena internacional. ¿Qué opinan estas personalidades sobre Aquasella?

Esteban – Eso se lo tendrás que preguntar a ellos (risas). Sí nos consta que todos/as y cada uno/a de los y las djs que han estado en Aquasella han tenido una buena experiencia y lo han pasado genial.


WS – Por el contrario, también apostáis lógicamente por nuevos talentos, y cada año debutan muchos djs en el Sella. ¿Cómo reacciona un dj internacional cuando le explicas que va a actuar en “mitad de la nada” a orillas de un pequeño rio del norte de España?

Esteban – Para la mayoría de los artistas no es fácil venir a un pequeño pueblo del interior de Asturias, que no pueden ni ubicar en el mapa, al que para llegar tienen que coger en general varios vuelos y luego meterse cerca de una hora de coche. Están más acostumbrados a otro tipo de macro eventos en grandes ciudades, cuyo acceso es mucho más sencillo. Sin embargo, cuando llegan al prau y conocen el festival, quedan encantados y les quedan ganas de repetir.


WS – ¿Hay alguna anécdota que nos puedas contar sobre algún artista en Aquasella? ¿Quiénes han sido los que mejor se han portado y cuál el más desagradable en el cara a cara?

Esteban – Tras 23 ediciones celebradas, te podrás imaginar la cantidad de anécdotas y cosas curiosas que han pasado en AQS. Por contarte algunas, puedo empezar por el año 2003, cuando el formato era de un solo día, y tuvimos una tarde y noche muy complicada. Ese viernes se tuvo que cerrar el aeropuerto de Asturias por culpa de la niebla y los vuelos se tenían que dar la vuelta debido a la imposibilidad de su aterrizaje, por lo que todos los artistas que venían en avión no pudieron actuar. Se consiguió llevar a cabo el festival con mucha dificultad, alargando el tiempo de sesiones de los artistas que sí pudieron llegar. Ese año Pepo, el único artista que ha estado en todas las ediciones de AQS, hizo una sesión de 5h.

En el 2006, cuando Frank Kvitta estaba cerrando en el Open Air, dos “espontáneos” se subieron al escenario con su calzado en la mano diciendo “¡toma zapatilla!” “¡toma zapatilla!”. ¡El propio Frank acabó con su calzado en la mano bailando! Al rato, parte del público lanzó su calzado al escenario.

Otra anécdota de película fue la de “la noche de las hormigas voladoras” en el 2010. Cuando al anochecer, desde el Río sella, eclosionaron millones de estos bichos, que inundaron todo el festival. Fue increíble la lucha de los artistas a los que les toco actuar durante esa invasión. ¡Las pantallas de video de Vitalic se veían negras de la cantidad de hormigas que había! Aparecieron sobre las 10 de la noche y desaparecieron sobre la 1 de mañana, como por arte de magia.

Para acabar, y la más reciente, fue la de este 2019, cuando Nina Kraviz cerró el Open Air el sábado bajo la lluvia, con un público totalmente entregado. Al acabar la sesión, Nina, tras haber bajado al foso a hacerse fotos y saludar al público, volvió al escenario a decirnos que le apetecía seguir pinchando, que se lo estaba pasando genial. Le propusimos ir al after que en ese momento se iba a poner a funcionar y aceptó encantada. Cuando se puso a preparar el material para ir hacia el escenario del after, se dio cuenta de que el pendrive donde tenía toda su música no aparecía por ningún lado… Probablemente se le había caído en el foso durante los saludos con la gente. Por tanto, se fastidió la idea. Una gran pena no haber podido disfrutar de ese after con Nina. ¡Habría sido épico! Eso sí, en todo momento Nina no perdió la sonrisa de su cara y se lo tomó con mucha filosofía. Una gran profesional y persona.

Respecto a la segunda pregunta, La verdad que el trato entre los artistas y la organización siempre ha sido impecable: pensad que dicha relación en la mayoría de los casos sobrepasa el vínculo laboral. En estos casi 25 años podemos decir que siempre hemos tenido un feedback perfecto con todos nuestros dj’s”.


WS – ¿Qué consejo le darías al pequeño promotor que quiere crear un festival en su provincia?

Esteban – Para la realización de un festival se requiere, además de un esfuerzo económico importante, contar con unos equipos de contratación artística y publicidad muy profesionales, minuciosos y con amplia experiencia en el sector.


WS – ¿Cuáles son las claves del éxito?

Esteban – En cuanto a las claves principales yo diría que son rodearte de un buen equipo humano de profesionales en los distintos capítulos que conforman el festival y tener la ubicación y fecha del evento idónea. Y aunque suene a tópico, creer firmemente en lo que haces.

Adrian Oller
Cofundador y redactor. Melómano, leonés y obseso de las cosas bien hechas. Imposible encasillarme en un sólo género. “Si quieres llegar rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos, camina en grupo”