R3hab volvió a Barcelona, una noche de lunes en la que no es muy habitual salir, para poner patas arriba Opium Barcelona
Una noche para el recuerdo. R3hab volvió a Barcelona, una noche de lunes, una noche en la que no es muy habitual salir. Opium confirmó su actuación tan solo con tres días de antelación, pero estábamos dispuestos a no perdernos semejante actuación de uno de los mejores DJ’s y productores del mundo.
Los primeros compases de la noche vinieron de la mano del ya conocido DJ residente de Opium Barcelona, Danny Cárdenas, con un ‘deep house’ muy tranquilito, ideal para pegarse los primeros ‘bailoteos’ de la intensa noche que quedaba por delante. Cabe destacar que durante el show de R3hab, Cárdenas se encargó de pilotar la iluminación de la sala y las espectaculares visuales.
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R3hab llegó muy puntual a la cita con el público barcelonés (eran la 1:50) y ya estaba en cabina dispuesto a poner Opium patas arriba. Conversó y saludó efusivamente al también DJ residente de Opium, Flavio Rodríguez, que hizo todo un warm-up a la altura de la visita internacional que venía al club. Un warm-up muy variado, pero muy acertado: empezando por un ‘future house’, ‘funky’, ‘groove’ muy tranquilo, pasando al trap y sobre todo al hip-hop, que fue lo que acabó de levantar a la pista y dejarla lista para la estelar entrada de Fadil el Ghoul.
R3hab salió sin intro, con sus conocidos remixes a Calvin Harris (los de One Kiss y How Deep Is Your Love), pinchando temas ya míticos del EDM como ‘How We party’, ‘Bounce Generation’ o ‘The Wave’. Después, su sesión viró hacia un sonido más future house (destaca su tema Lullaby con Mike Williams). Acabó el set más tirando hacia la nueva música que está produciendo actualmente (future bass y trap). Su sesión duró una hora y media aproximadamente. Se pasó rápido el tiempo, pero cuando Fadil se pone a los platos, sala que pisa, sala que se rinde ante la energia de sus sets.
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El público (muy internacional, por cierto) estuvo entregado durante toda la noche, pero con R3hab lo dio absolutamente todo. La mayoría de los asistentes eran americanos (sobre todo), además de chinos e indios. La excepción la encontrábamos en las primeras filas, en las que los ‘fans’ barceloneses de R3hab se agruparon para saltar con todos y cada uno de sus temas. Me llamó la atención la cantidad de altos ejecutivos de empresas vestidos con elegantes trajes pasándoselo en grande con la música de Fadil. El ambiente propio de Opium un lunes, en definitiva.
En general fue una muy buena noche, en la que el club de referencia de la Ciudad Condal se acabó llenando hasta la bandera (ante todo pronóstico) y en la que se pudo ver a todo un DJ internacional de altísimo renombre en Barcelona. ‘Loco lunes’ en estado puro.
