18.000 personas disfrutaron de Sensation en la capital
Era uno de los eventos del año, y nosotros no nos lo quisimos perder, Sensation Rise Madrid 2018. Tras una espectacular primera edición en Madrid en 2008, donde la fiesta holandesa llenó el Palacio de los Deportes con artistas como Sander Van Doorn, Martin Solveig o Sebastian Ingrosso, la fiesta de ID&T llegaba 10 años después a IFEMA, uno de los recintos más grandes e importantes de la capital, garantía de éxito.
Un recinto que se vio muy bien aprovechado con un imponente escenario que ocupaba gran parte del espacio frontal, dejando ver unas estructuras, un escenario y una puesta en escena a la altura de muy pocos eventos. Bailarinas, fuentes de agua, pirotecnia, efectos especiales, luz y color fueron algunos de los ingredientes diferenciadores de esta fiesta, que daba comienzo a las 20:00h de la tarde, con una peculiaridad que siempre la ha caracterizado: todos los asistentes debían ir de blanco impoluto.
Nuestra aventura comenzó pasadas las 22:00h, cuando el dúo holandés Shermanology desplegaba todo su arsenal musical ante una buena afluencia de público que ya abarrotaba el centro de la pista. Tras ellos, los nacionales Abel Ramos y Albert Neve calentaron lo que sería una gran noche de música con un buen repertorio de mashups, así como sus últimas producciones. Cuando su set finalizó, pudimos disfrutar de un espectáculo de unos 10 minutos donde sonaron algunos de los temas más míticos de la historia de la música electrónica, acompañados de la performance de las bailarinas.
The Story of Hardwell: expectación por un ¿documental?
Llegaba el primer momento destacado de la noche, y es que el DJ residente, Mr White, hacía acto de presencia en la cabina en lo que sería una de las sesiones más sorprendentes e inesperadas de la velada. Más aún para gente como nosotros que nunca habíamos tenido la oportunidad de escucharle en directo, por lo que salimos gratamente sorprendidos. Tras él, otro de los pesos pesados del cartel, un artista que no necesita presentación pues es de sobra conocido tanto en la capital como en nuestro país, con una fanbase al alcance de pocos artistas. El maestro Kryder comenzaba su set ofreciéndonos un anticipo de lo que será uno de sus nuevos trabajos, progressive house de calidad que nos recuerda a otro gran tema como es ‘Crocodile Tears’. Aunque este último no sonó, si que lo hicieron una gran cantidad de IDs tanto del inglés como de otros artistas de su sello, como es el caso de nuestros amigos Jose de Mara y Crusy, con su futuro lanzamiento ‘De Beber’. En definitiva, y para nuestro gusto, uno de los mejores sets que hemos escuchado del dueño de Kryteria Records en mucho tiempo.
Cogiendo el testigo del fantástico set del británico, llegaba a continuación la artillería pesada desde Holanda. Fedde Le Grand, al cual pudimos ver este verano en la capital, no quiso sorpresas y se metió al público en el bolsillo a base de mashups. Vocales muy conocidas que rompían con temas variopintos dentro de la electrónica más comercial. Desde Post Malone a Macklemore pasando por J Balvin. El house se vió apartado dando paso a la contundencia y la euforia del big room, antesala del que sería el momento cumbre de la noche cuando entraron en cabina W&W. El dúo holandés no quiso esperar ni un segundo para dejar claro que ellos iban a ser los encargados de quitarnos las fuerzas -y las ganas- en este final de noche. Sonaron sus últimos temas en solitario y en colaboración con Hardwell, Blasterjaxx o Dimitri Vegas & Like Mike y Aoki, y aún tuvieron tiempo de sacar su lado ‘trance’ con su alias NWYR antes de dejar paso al último invitado.
El último set de la noche corría a cargo de otro holandés con buena fanbase en nuestro país. Nicky Romero fue el encargado de cerrar el festival y para ello decidió hacerlo a ritmo de sonidos underground. El dueño de Protocol Recordings sorprendió (¿para bien?) con casi media hora de techno y tech-house, algo que no acostumbra a hacer, para después ofrecer su repertorio habitual, sonando algunos de sus últimos lanzamientos como ‘Bittersweet’, ‘Rise’ o ‘Duality’.
En definitiva, muy buen sabor de boca en esta edición del festival holandés, Sensation Rise Madrid 2018, en el que el público disfrutó de un gran espectáculo gracias a un cartel de lujo y una organización impecable, marca de la casa de una gran empresa como es ID&T, organizadora de algunos de los mejores festivales del mundo como Tomorrowland o Misteryland.
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