El megacomplejo de la capital reafirma su broche de oro como mayor referente del hard en España con un cartel abrumador protagonizado por más de medio centenar de artistas repartidos en seis espacios

Con una carta de presentación difícilmente superable, Fabrik Madrid abrió las puertas de su templo el pasado 11 de junio a un enorme séquito de amantes de los harder styles de todos los rincones del país y del mundo con el debut de NEXUS Festival, su propuesta de gran formato que puso la guinda al pastel tras el consolidado recorrido de sus famosas 150.

Su line-up, confeccionado al más mínimo detalle, hablaba por sí solo incluso antes del evento. Se convirtió así en la fecha a marcar de muchos en sus calendarios, y en el único punto de encuentro para los fieles a los BPM altos en toda la temporada festivalera de nuestro país. Más todavía tras la cancelación de Octopus.  Por la mítica Fabrik ha pasado prácticamente todo artista de hard habido y por haber. Pero la sala tenía la capacidad para dar un paso más, subir de nivel, y coronarse con un evento como NEXUS.

Con un horario que permitió el tardeo al aire libre antes de que cayese el sol en su polivalente Terraza, pudimos bailar con los primeros asistentes a ritmo de Juandy Power y Vicente One More Time, que darían paso a dos de los imprescindibles de la velada: Technoboy & Tuneboy. El legendario dúo actuaría por partida doble con otra hora en la Main, pero fue sin duda el set inicial el que puso la piel de gallina a más de uno a base de clásicos de reverse bass que rondan ya los quince años de antigüedad. Le tomarían el relevo los abanderados de la rama más euphoric, comenzando por Adrenalize con remixes a tracks trendy y seguido de Atmozfears. Sus emotivos lyrics fueron cantados a pleno pulmón hasta que se hizo de noche, con reconocidos tracks como ‘home’ y muchas IDs por desvelar.


De “claro” pasamos totalmente a oscuro con un Hangar que prometía los ritmos más duros de la noche. Mad Dog hizo vibrar con su sublime hardcore hasta al gabber más parado a través de una selección de temas que reflejaron sus años de experiencia a los mandos. Si bien, la gran cantidad de gente allí presente y las altas temperaturas hicieron casi inevitable el traslado del resto de la programación de la sala a La Terraza, y viceversa. Esto incluía a dos platos fuertes de la noche, Sefa y Angerfist, que movilizaron a cientos de personas hasta un open air que permanecería lleno hasta el cierre. Mirándolo por el lado bueno, este cambio hizo que ciertos curiosos e hinchables objetos en el set de GPF pudiesen volar con libertad.

En la Crystal Area quedó plasmado la calidad y cantidad de talento que nuestros productores nacionales ostentan por sí solos, con sesiones esenciales de nombres como Kaotik Mind o Atarynoice, tan presentes en sellos españoles e internacionales. La Satélite fue el espacio para los más forofos del rawstyle, donde la crudeza y kicks cortantes se materializaron con artistas como Kronos o Adaro, quien se estrenó por primera vez en Fabrik.


La Main Room estaba reservada para los chicos populares de la noche. El capo de Dirty Workz, Coone, no decepcionó con su, ya considerado mainstream, pero característico hardstyle que acompañado del famoso megatrón de Fabrik, crearon el ambiente festivalero ideal. Tras el belga vendrían los líderes de Art Of Creation. En primer lugar, el experimentado Wildstylez con himnos como ‘Warriors’ o ‘Legends Never Die’. Al 50% de Project One le seguiría su media naranja, Headhunterz, con un esperado set que dio mucho de qué hablar, para bien y para mal. Heady, el rey para muchos aunque cada vez para menos, no decepcionó con su selección de temas pero sí con su presencia en cabina, acompañado en todo momento de invitadas que subieron incluso a la mesa de mezclas.  

Entre tanta polémica vendría a dar finalmente una dosis de profesionalidad y vanguardismo el gran Phuture Noize. Ya había pisado Fabrik en una de las últimas 150, pero en su regreso consiguió merecidamente un hueco entre los más grandes. Marco destacó en directo con el estreno de su última referencia ‘Landmines’ y tracks como ‘We Are The Fallen’ que pusieron el escenario principal del revés. Mención esencial al cierre con los residentes presididos por el vital Yeyo, quien pincharía hasta cuatro veces en las diferentes salas a lo largo de toda la velada.


Con todo, la atmósfera de la música hard siempre se siente como estar en casa. El sentimiento de comunidad y unión que se respira entre estos subgéneros es difícil encontrarlo en otros, y vivirlo en Fabrik Madrid, no fue sino un plus que demostró, como siempre, que el club estuvo a la altura de un cartel y una escena tan especiales y entregados. Esperamos que esta sea la primera de muchas NEXUS ¡Larga vida a propuestas como esta!

Constan Moreno
Todo lo que tenga bpm altos me llama la atención, pero cualquier tipo de electrónica es bienvenido.