Tras tres días de infarto, más de 100 DJs del más alto nivel desfilando por las cabinas, y miles de fans disfrutando en la pista, la sesión madrileña se despidió por todo lo alto con un cartel que, para muchos es el mejor que han visto en bastante tiempo
CODE, Fabrik y techno son tres conceptos que van prácticamente de la mano y han crecido juntos a una velocidad de escándalo para situarse como una de las referencias claves del panorama. Y es que la marca madrileña se propuso hacer historia y, una vez acabada nuestra experiencia durante su particular 20 aniversario, podemos afirmar que han cumplido con creces.
CODE continuó la celebración de su 20 aniversario con una notable segunda parte en Fabrik
Sin duda estas fechas estaban marcadas en rojo, en los calendarios de mucha gente nada más se hicieron oficiales y, tras disfrutar de las dos primeras ediciones de esta trilogía, era imposible faltar a esta cita de cierre. Es por eso que el pasado 5 de diciembre no había otra opción que la de peregrinar a la discoteca de Humanes y vivir en primera persona un evento único e irrepetible.
Además, sabiendo que cada vez hay más público joven, aunque CODE toca todos los palos del techno (otra razón por la que es tan especial) en esta última entrega el cartel estaba plagado de grandísimos nombres de hard techno y eso hizo que el sold out estuviese casi asegurado y las salas casi a tope, desde el primer momento.
Comenzamos a hablar ya del evento en sí y es que había un problema, teníamos a nuestra disposición tanto talento que era casi imposible elegir y obligatorio entrar pronto para disfrutarlo al máximo. Es por eso que, a las 22:00 ya estábamos más que dentro en una Main Room a rebosar (a pesar de la hora) que recibía a una de las leyendas de este género.
Richie Hawtin es un nombre que trascenderá de generación en generación y que, una vez más demostró que se puede hacer un grandísimo set sin abusar mucho de Bpm, mezclando con maestría minimal y acid en un set sobrio, pero divertido, una vez más, el británico dio cátedra en cuanto a techno se refiere.
Pero, como dijimos antes, esta CODE iba a venir fuerte y es que, mientras Hawtin deleitaba a la Main Room con sus melodías y ritmos hipnóticos, la realidad en el Area 19 era totalmente distinta. En cabina estaba una bestia desatada que poco le importó pinchar tan pronto para elevar los BPM a un nivel casi de hardcore.
Cristobal Pesce o el Demon Boy como cariñosamente le conocen en el mundillo se dedicó a ¨jugar con la mesa de mezcla y los Bpm¨ mezclando temas potentes con melodías, música más clásica con neorave y soltando tracks propios como ‘Sex positive’ o ‘Paranoia’ que hicieron enloquecer al público.
Este juego del chileno se transmitió a la pista de baile donde todos disfrutaban y se movían frenéticamente, al igual que lo hacía el DJ en cabina. Sin duda, este artista tiene algo especial y sus sets son auténticas montañas rusas. Si lo disfrutasteis sabéis de lo que hablo sino, simplemente apuntad bien su nombre y estad atentos porque le volveréis a ver.
Tras ver a una de las jóvenes promesas había que regresar a la Main Room ya que, otro joven tomaba los mandos de la nave y este set era un must clarísimo antes de entrar. Nada menos que el enmascarado, uno de los mayores talentos de la escena, I Hate Models. Como siempre cuando se trata del francés, es difícil adivinar por dónde nos va a salir. En esta ocasión, esperábamos su versión más tranquila, ya que se subió a la cabina justo al llegar la medianoche, una hora mucho más temprana a la que estamos acostumbrados a escucharle.
Por el contrario, empezó con mucha fuerza, sorprendiendo a todos con un techno muy contundente y plagado de BPMs, pero esto solo duró durante las primeras canciones. No fue hasta más tarde cuando volvimos a ver al I Hate Models que más conocemos, con un techno muy melódico pero sin perder esa potencia que le acompañó de principio a fin. Un set muy completo y ecléctico en el que también tiró de clásicos, como su versión de ´Freed From Desire´, que marcó uno de los momentos a recordar de la noche.
Finalmente, tras un juego de ácidos a gran velocidad demostrando su maestría, el francés dejó la cabina y esta la ocuparon un dúo que, hace un par de años eran emergentes pero ahora ya están más que consolidados. 999999999 tomaban las riendas de la Main y, como os podeis esperar, la hiceron estallar con sus temas clásicos como ‘Love 4 RAVE‘ mezclados con lo que se les iba ocurriendo según veían la pista de baile. Podemos estar hablando de dos de los mayores exponentes del hard techno versión live. Sus ácidos y sonidos reverberantes se mezclaban con drops poderosos que no dejaban tregua, pero nosotros debíamos continuar. Dejamos a los italianos con la sala principal a sus pies y seguimos nuestro viaje.
Wololo Sound entrevista a 999999999
La noche no nos daba respiro y es que, había mucho más que la Main en esta CODE. Es por eso que también estuvimos muy presentes en una de nuestras salas favoritas como es el Hangar. Este se tiñó de negro y nos hizo disfrutar de los sets más oscuros y contundentes de la noche. Es estilo agresivo y con tintes de neorave de Dax J nos dio la bienvenida y quedamos en manos de dos mujeres de bandera. SPFDJ y Paula Temple, la primera combinó beats y drops contundentes con melodías muy bailables llenas de vocales y ritmos grooveros pero siempre bajo un aura tenebrosa (en el buen sentido de la palabra).
A continuación, llegó el turno a la británica que comenzó a crear un infierno a base de industrial con potencia, control y muchos galones. Un auténtico show de hard techno que dejó el ambiente perfecto para el cierre de la sala. Este corrió a cargo de un Vendex que, como bien sabemos, en el infierno se siente como pez en el agua. Aprovechando a la perfección como había dejado la sala Paula, su set fue un derroche de energía oscura repartiendo bpms sin piedad y con una gran performance.
El enmascarado disfrutaba tanto que, mientras hacía arder la pista con ‘Praetorian Hell‘ o ‘Sanguine Fountain‘ pidió alargar su set y no terminó su particular ¨descenso al infierno¨ hasta pasadas las 8:00.
Aunque parezca imposible estar en todos lados, esta CODE era perfecta para hacer kilómetros, así que, tras salir un rato al Area 19 para disfrutar de la potencia de Kozlov, antes de volver a la Main Room había que pasarse por la Satelite donde escuchamos los ritmos del techno más clásico de la mano de Ben Garló, Raul Parra, los residentes Nuke y Cesar Almena y un David Mallada que nos regaló un cierre a vinilo para guardar en videotecas.
Por otro lado, si querías más intensidad en un ambiente eclectico y cercano, sin duda había que acudir a la Club Area, allí nombres como Brenda Serna o Essan, las cuales a pesar de su juventud recomendamos sobremanera no dejaron respiro alguno mezclando temas muy agresivos pero con un toque fresco y dinámico perfecto para bailar enérgicamente. Una pareja que, en el futuro no nos importaría ver en B2B.
Finalmente, para despedirnos de la Main disfrutamos del final del ¨psytrance show¨ de Indira Paganotto que culminó energicamente ya que tenía que dejar el terreno listo para lo que se avecinaba. Tras la canaria, llegaba uno de los DJs y productores más en forma del panorama, el alemán Klangkuenstler. Para nosotros es una de las opciones más fiables si quieres tener un fin de fiesta por todo lo alto y, una vez más, demostró porque es tan querido y valorado.
Maestro del schranz, Klang asumió su primera vez en la Main Room con una sobriedad y unos galones de mucho nivel, entendiendo en cada momento que quería el público, llevándoselos a su terreno con intros épicas y rompiendo la pista de baile, con drops explosivos. No faltaron clásicos como ‘Weltschmerz‘ ‘Untergang’ o su ya clásico ‘Die Welt Brennt‘ para culminar un set de altos vuelos que pudo ser la rúbrica a esta magnífica edición, pero aún quedaba un poco más.
La noche iba llegando a su fin, y con ella, el final de esta Trilogía que tanto ha dado que hablar y con la que tanto hemos disfrutado. Los cierres tenían que estar a la altura de la ocasión, y lo estuvieron. La Main Room recordó a lo que solían ser los cierres de CODE el año pasado, con Nuke y César Almena, ambos residentes de Fabrik y de la propia sesión.
Otro de los cierres más sonados y multitudinarios fue el de Stan Christ. Con el Area 19 completamente llena y ritmos muy rápidos pero a la vez con un sonido fresco, dio con la combinación ideal para un buen set final. La música dejó de sonar por completo a poco más de pasadas las 8, convirtiéndose así en una de las veladas más largas de todo Fabrik, que acostumbra a cerrar sobre las 7. Esto, sumado al cierre de Vendex, nos encantó y ojalá Fabrik y los djs tomen nota y ¨continúen la fiesta¨ cuando esta lo reclama. Solo nos queda darles las gracias y esperar que esto se convierta en costumbre.
Se cerró así la que puede que haya sido la mayor demostración de techno en Fabrik hasta el momento, por la que han pasado grandes nombres de todos los tiempos. Algunos de los artistas que nos han acompañado han sido Richie Hawtin, Ben Sims, I Hate Models, Patrick Mason, SNTS, Luciid, Parfait… y muchos más. Hemos podido escuchar todo tipo de techno estos pasados meses en la mejor y mayor edición de CODE que recordamos, y es que CODE cumplía 20 años, y no era para menos.
Aunque hayamos tenido techno y más que techno por un tiempo gracias a la Trilogía, parece que nunca es suficiente. Por eso, Fabrik y CODE volverán en enero con el ya mítico All Night Long de Fatima Hajji de todos los meses de enero, otra de las fechas grandes de la sesión. Las entradas están ya disponibles en su canal de venta oficial y queda poco para conocer el cartel completo.
