Cala Mijas fue uno de los festivales que más nos encandilaron el año pasado y esta edición nos ha reafirmado que tiene algo especial. Disfrutamos de tres días al ritmo de Underworld, Florence + The Machine, Moderat, Arcade Fire o The Strokes y muchas más actuaciones que te contamos a continuación

El año pasado despedimos el verano en lo que etiquetamos como “el comienzo de una bonita historia”. 365 días después, con las expectativas altas que deja el trabajo bien hecho, volvimos a volar hasta la costa malagueña para gozar del segundo capítulo de este cuento musical en el que se ha convertido el hermano andaluz del festival BBK Live, y su edición de 2023 cumplió con creces lo esperado. Sin más dilación y sin querer hacer mucho más spoiler, así fue nuestro paso por el Cala Mijas 2023:

Jueves

Primer día de festival y, tras recoger nuestra pulsera con una gran rapidez, nos adentrábamos en la localización idílica del festival Cala Mijas. Con unos pequeños retoques de disposición de los escenarios respecto a la edición anterior, se seguía aprovechando de manera perfecta todo el espacio disponible desde los escenarios principales hasta La Caleta. Todo ello con un ambiente muy plural y con un gran abanico de edades en el público, que pudimos comprobar viendo a Cupido en el el que fue nuestro primer concierto de Cala Mijas 2023.

Tras la banda madrileña encabezada por Pimp Flaco, nos dirijimos a visitar por primera vez a La Caleta donde estaba actuando la DJ Budino para ver atardecer en este lugar idílico. Esta vez con sonido envolvente (aunque con un poco de rebote si te colocabas a las afueras del círculo que conformaba el escenario) gracias a los altavoces situados perimetralmente, que abrazaban una bola de discoteca la cual presidía el lugar y se convertía, con permiso del DJ que estuviera en ese momento, en la gran protagonista.

Una vez cayó la noche, pudimos disfrutar de la maravillosa voz de Amaia en un concierto donde cantó sus mejores éxitos, colaboraciones con artistas como Alizzz y cuyo momento álgido fue ese alegre alegato feminista creado junto a Rigoberta Bandini que nos puso a saltar y bailar como bien indica el título de la canción, y que nos dejó preparados para ver a los headliners de la noche.

Pasadas las diez y media de la noche, la mayoría de los asistentes se agolparon en el mainstage para ver una de las pocas actuaciones que realiza la banda canadiense Arcade Fire en nuestro país. Un concierto en el que entraron triunfalmente al escenario bajando las escaleras desde el backstage mientras que en todo momento las cámaras les enfocaban a ellos. Una vez llegaron al escenario y dieron rienda suelta a su música, tuvieron al público a su merced a lo largo de todo el show. Un show que tuvo momentos estelares para cada miembro de la banda y en el que utilizaron instrumentos de todo tipo, pero siempre con Win Butler llevando la batuta.

Arcade Fire

Y por supuesto el colofón de la actuación llegó al final, donde Arcade Fire cantó sus temas más populares. Nos hicieron brincar llenos de felicidad gracias a ‘Everything Now’ y, como no podía ser de otra forma, finalizar el espectáculo con todos nosotros coreando al unísono el cántico más famoso que tienen, el de ‘Wake Up’. Definitivamente el momento más mágico de la primera jornada y que nos dio ese extra para afrontar el resto de la noche, donde después de la actuación estrella nos dirijimos de nuevo a La Caleta para bailar al ritmo de Nicola Cruz.

Pasada la media noche y con más ganas de guitarras pasadas por amplificadores, nos arremangamos para asistir a la que, de lejos, fue la performance más visceral y agresiva de todo el festival. Idles dejaron bien claro desde la primera canción que iban a convertir la pista de baile en un campo de batalla. Y es que durante la casi hora y media que duró su actuación, no hubo descanso alguno entre moshpits, lavadoras y otras modalidades de agitaciones de masas que no habíamos visto hasta la fecha. Un escándalo (de los buenos) para los que os gusta sudar en los conciertos.

Siguiendo la racha rockera pero con una marcha menos –nadie podía superar eso–, Foals se encargaron de cerrar el mainstage como últimos headliners de la noche. Un concierto que agrupó a una gran masa que bailó, gritó, cantó y salto a ritmo de sus hits como ‘Inhaler’ o ‘Mountain At My Gates’. Y tras previo paso por La Caleta para disfrutar un poco del ambiente divertido que se respiraba gracias al set de Prosumer, tocaba guardar energías para afrontarn a los cabeza de cartel electrónicos de la jornada.

Moderat pusieron a prueba el sistema de sonido del escenario Victoria con un live más contundente de lo que recordábamos. La puesta en escena del trío alemán nos regaló un vaivén de oscuridad y dulzura capitaneados por la voz de Apparat y unas visuales minimalistas que complementaban sin distraer la interpretación de temas como ‘A New Error’ o ‘FAST LAND’, este último sacado de su último LP ‘MORE D4TA’.

Moderat

A su vez y justo en frente de Moderat (dato importante para lo que vamos a contar después), el trío madrileño VVV [Trippin’you] desató la locura para aquellos que querían acabar el día con espíritu punk y bakala. Agresividad y diversión a partes iguales para poner el broche de oro a la primera jornada con temas como ‘Hiedra Verde’ o ‘Invierno Nuclear’, y un juego de lásers tan potente que incluso personal de Moderat fue a quejarse al stage manager del trío porque deslumbraba a la banda alemana al otro lado del recinto. Una curiosa y pequeña anécdota con la que acabamos nuesta aventura en el primer día de Cala Mijas 2023.

Viernes

Entramos al recinto justo para ver el show de Cariño y dirigirnos a la zona electrónica para bailar a ritmo de uno de los DJs de moda en la capital. Yung Prado sacó el polvo de las CDJs de La Caleta para ayudarnos a entrar en calor para una jornada más larga que la anterior. Su sesión, plagada de toques eurodance, italo disco, bajos redondos y percusivos y sonidos remember, agitó bajo el sistema de sonido 360 del stage a aquellos que iban entrando al recinto, llegando a momentos cumbre como cuando sonó su producción ‘Me Escondo Por El Club’ o su remix al ‘Ay K Emoción’ de Chill Mafia, que despertaron a los que realmente estaban allí para visitar al DJ catalán.

De allí bajamos la cuesta para gozar –porque ningún otro verbo describe mejor lo vivido– del groove mediterráneo. Desde Napoli, Nu Genea y su banda sacaron sonrisas sin parar encantando a la muchedumbre con ritmos funky y disco e incluso crea,do una espontánea conga que sorprendió hasta los propios músicos.

Nu Genea

Mientras tanto en el escenario Victoria, la representación indie nacional más potente del cartel se hizo notar engatusando hasta el mismísimo Pedro Sánchez. Lori Meyers dio una absoluta masterclass de lo que tiene que ser un concierto, derrochando energía por los cuatro costados e interactuando con la gente y cantando sus mejores éxitos en uno de los highlights del viernes.

El tiempo pareció detenerse de nuevo en el mainstage, y de repente comenzó a sonar el icónico ‘Vamos A La Playa‘. Con una actitud despreocupada, Julian Casablancas y compañía subieron al escenario como verdaderas estrellas del rock. The Strokes eran sin duda uno de los actos más esperados de todo el festival, y es justo decir que las expectativas superaron la realidad. Su actuación, al parecer, decepcionó a los fanáticos más devotos de la banda estadounidense y se destacó más por lo que Julian dijo en el micrófono que por lo que cantó. Aun así, los momentos de macro-karaoke con ‘Last Night‘ o ‘Adults Are Talking‘ fueron inolvidables.

The Strokes

Y para lo que restaba de la jornada, nos íbamos a sentir como en casa bailando con actuaciones electrónicas muy exclusivas. La primera fue la sensible puesta en escena de M83, en un alarde de magia con toda la banda al completo interpretando su repertorio cinemático. Eso sí, puede que un tanto tarde para la baja intensidad de la gran mayoría de sus canciones. Pero, aunque parecía que todo indicaba que debíamos quitar el pie del acelerador, llegó lo que probablemente fue la sorpresa de la noche.

Underworld demostraron por qué merecen el estatus de leyendas. Su puesta en escena era relativamente simple para la gran magnitud del Sunrise Stage, pero llenaron el vacío con golpes de bombo y sintetizadores. Fue un concierto plagado vitalidad y electricidad que nos dejó con una bonita reflexión: es curioso ver cómo los artistas más veteranos nos hicieron disfrutar como verdaderos críos. Sin duda, uno de los mejores momentos de esta edición.

@wololosound Que los más veteranos del cartel nos hagan disfrutar como niños… Así de energéticos fueron #Underworld anoche en el #CalaMijas 🤯 #calamijasfest2023 #bornslippy #bornslippyunderworld #techno #electronicmusic #dj #fyp ♬ original sound – Wololo Sound

Hablando de sorpresas, aún teníamos una segunda carta bajo la manga. Nos cruzamos con Acid Arab para un último baile frenético antes del cierre. Sin embargo, de “breve” no tuvo nada, ya que nos retuvieron casi hasta el final del festival con lo que podría decirse que es justo lo que promete su nombre: líneas de bajo ácidas combinadas con melodías y vocales árabes. Fue un maridaje sumamente divertido que nos hipnotizó como si fuéramos serpientes encantadas.

Y cerramos el día en La Caleta al ritmo de Palms Trax. El DJ berlinés, con un escenario a reventar de gente que ansiaba música electrónica a altas horas d ela madrugada, realizó un set muy dicharachero apoyándose sobre todo en sonidos house y disco, a veces subiendo la velocidad con temás más contundentes pero usualmente entre los 125-130 bpm, que contentó a todos los que estaban allí. Una auténtica fiesta disco para poner el punto y final a la segunda jornada de Cala Mijas 2023.

Sábado

Y en un abrir y cerrar de ojos nos plantábamos en el último día de festival, el cual abrimos con el trapero argentino Duki a los mandos. El fenómeno urbano contagió su energía mientras atardecía en el recinto con sonidos desde el reggaeton hasta, sorprendentemente, el psytrance. Una actuación que nos puso a tono para lo que vendría más adelante pero que sí que notamos falta de chispa dentro del público, seguramente a causa de la mezcla de sonidos que habría a lo largo del sábado en el mainstage y cuyo target no es el principal de la música de Duki.

Una vez acabó, las primeras filas no se movieron ni un ápice aún cantando Ethel Cain, uno de los nuevos diamantes de la música indie estadounidense de la cual pudimos admirar su preciosa voz. Y esto se debe a que el headliner de este día, Florence + The Machine, se debía de ver cuanto más cerca mejor.

A punto estuvimos de perdernos esta actuación, ya que Florence Welch tuvo que cancelar shows debido a una operación de urgencia en sus pies. Pero por suerte pudimos disfrutar de la que fue, sin temor a equivocarnos, la actuación del festival. Poniendo fin a su tour ‘Dance Fever’ (su reciente álbum del año pasado) y pese a estar todavía recuperándose, regaló una experiencia que va más allá de la música. Su sola presencia en el escenario, acompañada de su bella voz y un espíritu joven y afable al interactuar con sus mayores fans generó un espectáculo que solo puedes entender si estás allí en directo.

Florence + The Machine

Cantamos ‘Free’ a pleno pulmón, nos emocionamos con ‘Never Let Me Go’ e incluso logró que todo el público guardara sus teléfonos móviles para entrar en su “ritual de iniciación” con ‘Dog Days Are Over’, un momento mágico de esos en los que niguna cámara puede captar el sentimiento que estás viviendo cuando saltas y gritas con tus amigos, tu pareja o un desconocido que está a tu lado pero que está compartiendo el amor a la música al igual que tú. Y es un momento que solo artistas como Florence + The Machine pueden conseguir. Desde aquí os recomendamos encarecidamente que, a la mínima oportunidad que tengáis de poder vivir esta sensación en directo, lo hagáis.

Y claro, una vez has visto la excelencia tan de cerca, todo lo que venga después puede saber a poco. Pero ahí estaba ya para remediarlo I.Jordan en La Caleta con nuestro set favorito de todo el festival: rápido, disfrutón, bailable y lleno de hits que alumbraban junto a la bola de discoteca la pista circular. Podríamos haber caído en ese momento tan peligroso y tentador a la vez que se vive en los festivales en los que el escenario de música electrónica te atrapa y no te quieres ir. Pero, tras previa parada para ver el final del show de Baiuca, honrando como siempre a su tierra con esa mezcla folclórica gallega y electrónica, tocaba ver a The Blaze.

La última actuación del mainstage en el Cala Mijas 2023 corrió a cargo del dúo francés, que no defraudaron a todos aquellos que decidieron pasar sus últimos minutos de este festival tan genial con ellos. Su hora de show fue como ver una auténtica película musical, disfrutando con su show de luces y con las visuales en las que aparecían sus videoclips. Las cuales, dato curioso, han rodado ellos mismos ya que también son cineastas. Pero al contrario que en el cine donde tienes que estarte quieto, aquí bailamos sin parar recorriendo los mejores hits de The Blaze como ‘Eyes’, ‘Heaven’ o ‘She’.

The Blaze

Y ahora sí que sí, tras finalizar The Blaze, nos dirijimos a poner el punto y final al festival con el extravagante show de ARCA. Un escenario lleno de utensilios tales como un columpio o un biombo con los cuales ARCA fue interactuando a lo largo de un DJ set en el que, no nos vamos a andar con rodeos, puso lo que le dio la gana. Pero oye, esto es ARCA, un espectáculo transgresor que o te adentras dentro de su mundo o te va a costar disfrutarlo. La concida como reina madre finalizó su show cantando sus canciones más famosas: ‘Prada’ y ‘Rakata’.

Y lo de que tienes que adentrarte en el show y dejarte llevar lo pudimos comprobar con esta última canción, ya que la tormenta que tanto se anunció nos estuvo perdonando hasta ese momento, en el que en un abrir y cerrar de ojos todos nosotros estábamos empapados pero sin dejar de cantar y disfrutar del show de ARCA, creando así uno de los momentos más especiales de todo Cala Mijas 2023. Y aún lloviendo, el público pidió que cantará aún más, petición que se cumplió cuando se entonó acapella (ya que de todo el desenfreno del show había desconectado el equipo de DJ) ‘El Alma Que Te Trajo’. Poniendo ahora sí el broche final a nuestra aventura.

Mencionar también el gran trabajo que ha habido a lo largo de todo el festival con las diferentes líneas de bus, las cuales fueron muy rápidas en todo momento y muy bien organizadas, así como los accesos al festival. Se nota que quien está detrás de Cala Mijas lleva ya muchos eventos a sus espaldas y, aunque sea la segunda edición de este festival, no hay errores de novato y todo funciona como un reloj suizo.


Cala Mijas 2023 nos ha dejado actuaciones memorables y se ha confirmado, como ya nos dio la sensación el año pasado, en uno de nuestros festivales favoritos tanto por el cartel, como por la fecha y la localización. Dar las gracias a todo el equipo que lo ha hecho posible y a los grandes profesionales que han trabajado para hacer nuestra estancia muy fácil durante todo el transcurso del festival. No hay mejor manera de acabar el verano que disfrutando de este evento, así que probablemente nos veamos de nuevo del 29 al 31 de agosto de 2024, fecha para la tercera edición de Cala Mijas.

Óscar Ruiz
Se podría decir que los auriculares ya son una extensión más de mi cuerpo. Un periodista al que le encanta viajar, ver Netflix hasta las tantas, y por supuesto la música. | "It's all about house music"