El DJ italiano, uno de los reclamos más grandes en el panorama actual del techno, se dejó caer como parte de la programación de la nueva sala de Madrid y nos deleitó con 2 horas de auténtica esencia club
La última parte del año ha cogido un color de lo más atractivo en The Bassement Club. La nueva sala de la capital ha conseguido/va a conseguir juntar en apenas 50 días a artistas como Artbat, Mathame, Nora En Pure, Sven Vath, HI-LO (Oliver Heldens), Andrés Campo o Enrico Sangiuliano. El evento de este último tuvo lugar este pasado sábado, y logicamente no dudamos ni un segundo nuestra asistencia.
Eventos de música electrónica en Madrid este fin de semana
Enrico Sangiuliano es un artista que podríamos decir está en estado de gracia. Su popularidad ha subido como la espuma, no lo vamos a negar, tras anunciar su relación con la aún más popular Charlotte de Witte, pero Enrico es mucho más. El productor italiano lleva un lustro demostrando tener un estilo único y un sonido que lleva el techno de sus lanzamientos y de sus sets a un nivel y un ritmo envidiable para muchos otros djs quizá más planos en la mezcla o menos virtuosos en la producción. Enrico toma riesgos en ambos apartados y eso es siempre admirable.
Night Stories es un dúo compuesto por Ioan Gamboa y David Lozano, y fueron los encargados de encender la pista las dos horas previas a la actuación del plato fuerte de la noche. Siempre que hablamos de la tarea del warm-up lo hacemos desde el más profundo respeto, ya que no es nada sencillo actuar para un público que, entre comillas, está deseando que tu set termine. Estos dos consagrados y veteranos artistas lo hicieron a la perfección sabiendo combinar estilos melódicos con kicks más agresivos y ligados a la línea musical de Sangiuliano. Un set de notable alto sin duda alguna.
Los asistentes no sabían los horarios que componían la velada de The Bassement Club, al más puro estilo ibicenco en donde la incógnita de a que hora aparecería el DJ estrella rondaba en el ambiente. Pero al final como ocurrió con Lee Foss y creemos que va a ocurrir con la mayoría de artistas, Enrico se presentó a las 4 de la madrugada en la cabina para hacer las delicias de los asistentes. Un set oscuro acorde al ambiente de la sala, en la que el público junto al increíble equipo de iluminación de la sala llevó en volandas al artista y viceversa, siendo el momento culmen por supuesto ese ‘Age Of Love’ que ha conquistado a todos este año.
Sobrepasando las 6 de la mañana y con las luces del club encendidas invitando a los asistentes a salir para, o ir a casa o seguir la fiesta en otro lugar, Enrico finalizó su fantástico set de dos horas en el que aparte de brillar la parte oscura como hemos dicho, también supo introducir su toque personal en el que no es todo bombo sino que introduce melodías que emocionan a los asistentes antes de ser asestados con un potente drop que les ponía a disfrutar de la potencia clásica del techno. Una gran actuación de uno de los miembros de la pareja de moda que conquistó la noche madrileña el pasado sábado.
