Un año más el que es considerado por muchos el mejor festival de nuestro país y de los mejores del mundo abría sus puertas para cinco días que se quedarán grabados en la mente de los asistentes por mucho tiempo. Aunque, vayamos por partes. Desde que se anunció el cartel ya sabíamos que esta edición iba a ser increíble y ya, cuando se confirmaron los horarios por días y se confirmó el esperadísimo sold out estaba claro que El Prau iba a volver a vivir esos días mágicos que ocurren una vez al año en Arriondas.
Un festival que une estilos de música y con ello generaciones bajo la atenta mirada del techno que observa como sus hijos tanto a nivel de público como de DJs y de estilos musicales conquistan Asturias. Cinco días en los que el pequeño pueblo de Arriondas se convierte en un hervidero de diversión, sonidos envolventes, martilleantes, oscuros, alegres, mágicos e inolvidables. Cinco días en los que el río Sella está más vivo que nunca y el espíritu de El Prau transmite felicidad a todos cuanto lo pisan. En resumen, una experiencia imposible de perderse si amas la música electrónica y una experiencia que, un año más os contaremos desde Wololo Sound.
Llevamos desde el 1997 bailando aquí y un año más, era obligatorio repetir la experiencia, así que ¡Vamos allá! Comenzaremos recalcando que, debido al éxito de ediciones anteriores, este año se abrió el festival un día antes y no se escatimó en gastos en la preparty, ya que, para abrir boca, tuvimos el placer de degustar en el stage de El Bosque a uno de los DJs que más en forma está del panorama, Pawlowski.
El enmascarado fue el encargado de cerrar esta preparty y subió las revoluciones con un set muy de su estilo donde predominó el hardtrance y se mezcló desde clásicos noventeros hasta hits actuales como el ‘It´s that time‘ de Marlon Hoffstadt, parte de su EP ‘Final Outsider‘ o lo que pensamos que iba a ser el cierre debido a que lo pinchó con mucha pasión y grandes drops ‘Demonic Dimensions‘. Aunque el bueno de Antoine tenía otros planes para culminar y tras su famoso track nos regaló un remix a ‘Gloria’ que bien pudo ser el cierre definitivo, pero que alargó con medio track más el cual tuvo que cortar (se había pasado bastante de la hora y entendemos que le obligaron a cerrar antes) dejando un sabor de boca algo amargo. A pesar de este contratiempo, su set fue un gran pistoletazo de salida para lo que vendría a continuación.
Con este día de regalo que hasta este año no contaba con escenario de música oficialmente, pudimos disfrutar desde las 9 de la tarde bajo el nombre de Hi Aquasella! Antes del cierre tamprano de Pawlowski (a la una de la mañana), el encargado de estrenar la edición fue Unai, seguido de la DJ australiana Juicy Romance. Con un estilo muy marcado y enérgico, dejó la pista a punto para el que cerraría la primera noche de este festival.
En clave de hard sounds había un lugar específico para ello. Un lugar que ha sido aumentado respecto a otros años, pero que, aun así, fue una auténtica caldera durante los dos días de festival que estuvo abierta. Hablamos, como no puede ser de otro modo, de la Carpa Real donde los Real Ravers comieron bombo y quemaron zapatilla a gusto. El primer día comenzamos con una progresión desde el hard house a cargo de Delgado y el B2B entre K-Style y Carlos Pérez pasando por el techno hipnótico y sobrio de Nuke y llegando al final del día con el techno groovero de Future 666, quien dejo grandes sensaciones y un repertorio de mezclas que será recordado para la posteridad y un set completísimo en clave groovera y trance a cargo de Daria Kolosova.
El set de la ucraniana fue un conector entre el hardgroove (con el que estuvo mas de una hora), el psytrance y el hard techno, siendo una de las actuaciones que recordaremos por su impresionante closing melódico y envolvente. Tras ella tocó subir los BPMs con el ecléctico Alignment que, una vez más nos demostró su calidad y polivalencia, mezclando tracks de todo tipo con kicks duros e industriales y dejando momentos como su ‘Close Your Eyes‘ que pusieron la carpa patas arriba.
Aunque, algunos que también hicieron temblar la pista de baile, los altavoces y la multitud fueron los cuatro artistas encargados de cerrar el día. Comenzamos hablando con el B2B nacional de los residentes de Blackworks. Dexphase y Skryption se marcaron un gran set apostando por remixes de hard techno que triunfan solo con escuchar la intro como ‘I like the way you kiss me‘, ‘Vielleicht Vielleicht‘ o ‘Sweet Dreams‘. Su sinergia y sus drops fueron la mejor manera de cerrar para los amantes de este género.
Aunque, si Dani y Matías acabaron de destrozar la carpa, los dos DJs de antes ya la habían tirado abajo. Nada menos que SNTS y Klangkuenstler, industrial y schranz a tres o hasta cuatro canales que hicieron vibrar, agitar las manos y saltar a todos los allí presentes. Cada uno en su estilo ambos dejaron claro porque son de los artistas más queridos en España e hicieron que las últimas horas de la noche a cargo del lord y su ‘Katharsis‘ y los primeros rayos de sol con el ya mítico ‘Die Welt Brennt‘ fueran otro momentazo a recordar del festival.
Como punto negativo de este primer día en la Carpa La Real destacamos las visuales, las cuales nos parecieron muy pobres en comparación con los sets y el calado de los artistas que ocuparon la mesa de mezclas. Unas visuales que se resumían al rótulo de Real Ravers y el nombre del DJ abajo de la mesa. Por suerte, al día siguiente, cuando DURO tomó las riendas de la carpa mejoraron algo, incluyendo alguna imagen que casaba bien con los propios DJs y los tracks que estos pinchaban. A pesar de todo, se nos siguieron quedando cortas, más aún cuando la calidad musical y la actitud de los artistas fue más que notable.
Siguiendo con el takeover de DURO solo nos queda felicitar, era el último día, los ravers estaban hambrientos de bombo, percusiones industriales y drops rompedores y eso fue lo que se ofreció. Desde su apertura con dos talentos nacionales como son Carnada y Essan quienes demostraron que, aunque fuera de día se pueden poner tracks como ‘Take it all‘ por parte de la residente de Sonora o un edit a ‘Out of Space‘ por el lado de Alex.
Vendex lanza su proyecto más ambicioso y personal, esto es Valkhør
Tras ellos llegó el turno a Frank Kvitta quien se marcó un gran set abierto con un edit al track principal de Star Wars y marcado por el schranz más clásico. Aunque, si tenemos que destacar un set de schranz este es, sin duda, el de Vendex. El enérgico enmascarado volvió a dar una clase de como meterse al público en el bolsillo con un increíble set nonstop a tres y cuatro canales donde la potencia y la melodía confluían de manera magistral y sus bailes en cabina le daban el último toque de elegancia que hacía falta para completar una obra de arte a las que nos tiene acostumbrados. Además pudimos catar de primera mano parte de su nuevo EP que nos parece una maravilla, una vez más, gracias Vendex por hacernos parte de tu locura.
Y esto no acaba aquí, ni mucho menos ya que, si queríamos potencia la teníamos por todos los lados. Pudimos disfrutar también de un set super desvergonzado a cargo de Daniella da Silva y de un show musical donde se mezcla musica clásica con hardcore y hard techno con pop a cargo de Cristobal Pesce. Para poner el toque hipnótico y místico tuvimos a Wallis y uno de los grandes descubrimientos del día fue el set de Aida Blanco, muy agresivo y ganandose a un público que disfrutó cada segundo.
Finalmente tenemos que hablar de un sensacional Azyr a quien no pudimos ver mucho pero que destrozó El Prau a base de schranz y drops poderosos y de los dos encargados de cerrar la carpa como fueron 6EJOU y Sara Landry. Hablando del francés volvió a demostrar porque es uno de los máximos exponentes del industrial, con su sesión en live, sus juegos con la mesa, tracks como ‘Can You Feel My Heart‘ o sus drops cuidadosamente preparados dejó la pista de baile lista para la última de la noche y la encargada de clausurar la carpa. La buena de Sara sabía de sobra donde estaba y no escatimó en BPMs los cuales aderezaba con sus típicas melodías para que el público acabara de disfrutar las últimas horas de la mejor manera. Su ‘Heaven‘ y su ‘Pressure‘ fueron coreados a voz en grito y su closing emocional fue un gran broche para los que eligieron cerrar el festival a ritmo de hard techno.
Cambiando de tema, y centrándonos en el house y tech house, la noche del viernes trajo una de las grandes sorpresas de Aquasella. El Open Air, escenario principal del festival, se impregnó de los ritmos de estos géneros, en lugar de su habitual apuesta por el techno. Grave error por parte de la organización, que resultó el escenario menos frecuentado durante parte de la noche, a pesar de contar con grandes nombres como Paco Osuna, Jamie Jones, Seth Troxler, y el polémico cierre de Deborah de Luca.
La artista italiana cambió drásticamente el estilo que había predominado en el Open Air durante todo el día, optando por un set de hard techno (psytrance bass line) a 140 bpm. A pesar de que a una parte considerable del público le agradó, el set dio la impresión de estar pregrabado y cerró con un remix de ‘Si Antes Te Hubiera Conocido’, un tema de Karol G que incluso fue abucheado por algunos asistentes.
Después de un día en el que el house no tuvo mucho éxito, el sábado este estilo resurgió en El Bosque, donde pudimos disfrutar del gran Marco Carola, Manda Moor, Mason Collective, y el espectacular cierre de Héctor Llamazares.
Cuando hablamos de calidad, es inevitable mencionar el techno. Aquasella demostró, una vez más, por qué es uno de los grandes titanes de los festivales en España, presentando un cartel impresionante que fue distribuido a la perfección, gracias a una excelente progresión musical y de BPMs, cuidadosamente planificada por la organización del festival.
El viernes, el festival rindió homenaje al vinilo, con 4 de las 8 sesiones realizadas de manera completamente analógica. Lamentablemente, no pudimos disfrutar de este gran día en el Open Air. Sin embargo, El Bosque cumplió ampliamente con las expectativas, aunque en ciertos momentos el escenario resultó algo pequeño.
Los sets en vinilo de la asturiana Hermetica y la alemana Helena Hauff, el groovy techno de Rene Wise, el gran versus entre Nørbak y Quelza, con el que dejaron el listón muy alto, y el techno clásico del maestro DVS1 fueron la antesala de lo que sería, sin duda, el set más esperado de todo el festival.
Efectivamente, nos referimos al B2B entre dos eminencias del techno mundial: Oscar Mulero y Ben Sims. Simplemente impresionante. Estos dos DJs demostraron una vez más por qué ocupan un lugar privilegiado en la escena. Como era de esperar, cada uno contaba con su propio mixer y CDJs, un formato que les permitió expresarse de manera más clara, dejando que la creatividad, la técnica y la sinergia fluyeran con naturalidad. A diferencia de otros B2B, este se notó muy bien preparado y estructurado, siguiendo una línea y progresión musical muy definida.
Comenzaron con el techno hipnótico característico de Mulero, pero con un sutil toque de groove. Gradualmente, el groove y la contundencia fueron ganando protagonismo, hasta un punto en el que las percusiones y el groove dominaron la sesión, aunque, por supuesto, la oscuridad y el carácter hipnótico no estuvieron ausentes. A medida que se acercaba el cierre, los BPMs y la intensidad aumentaban, permitiéndonos disfrutar de temas como ‘Kraken’ de Stef Mendesidis, ‘Engine One’ de Luke Slater, e incluso alguna pincelada de trance y acid.
Wololo Sound entrevista a Ben Sims
Tras esta gran actuación, el listón parecía difícil de superar, pero entonces llegó Freddy K para demostrar que el nivel en El Bosque seguía siendo altísimo. Con un vinyl set de groovy techno, la contundencia, la velocidad y el baile estuvieron más que garantizados. Durante 90 minutos, el alemán dejó claro por qué es uno de los reyes indiscutibles del formato analógico, un trono que sin duda comparte con la DJ que le seguiría, The Lady Machine, quien también demostró su impecable manejo del vinilo.
Después de un viernes tan frenético y lleno de calidad, era necesario recargar energías para afrontar la traca final del festival, con más de 15 horas ininterrumpidas de música en una jornada marcada por la lluvia. Afortunadamente, el techno regresó al Open Air este sábado, y la hora señalada para comenzar fue a las 10 de la noche, con la primicia del live de Alarico, quien por primera vez actuaba en este formato en España. Groove, cierta oscuridad y bajos melódicos fueron los elementos más destacados de este gran espectáculo, que tuvo una excelente acogida por parte del público. El B2B entre Dave Clarke y Black Lotus siguió al italiano con un potente set de groovy techno y hardgroove, sirviendo de antesala a uno de los lives más exclusivos de todo Aquasella: British Murder Boys.
El dúo formado por Regis y Surgeon volvió a demostrar una vez mas porque es uno de los mas cotizados en la actualidad, y es que tanto las vocales que creaba el propio Regis como los tracks de off beat kick y los sintes que mezclaba Surgeon; hicieron una mezcla perfecta para crear un set hipnótico que dejó boquiabierto a una gran parte del público.
Llegarían las 3:00 y se notaba en el Prau que era un momento especial, puesto que el hijo pródigo, Oscar Mulero, volvía un año después al Open Air de Aquasella. Tras una gran actuación conjunto a Ben Sims el día anterior, el creador de PoleGroup, realizaría una vez más, un gran set; ligeramente más percusivo que de costumbre, pero igual de hipnótico y técnico como siempre.
Marcel Dettmann B2B Cem y posteriorimente Richie Hawtin le precederían a uno de los reyes de El Prau, el genio de los vinilos, Héctor Oaks. Un artista que está viviendo un momento muy dulce en su carrera y que es capaz de transmitir su energía a la pista de baile con solo pinchar un tema. Así fue y es que, gracias a su opening con ‘Vamos a Jugar en el Sol’ los allí presentes entendimos que si bien no todos los dias son fiesta, en ese momento tocaba.
Y tocaba un set vibrante lleno de subidas y bajadas donde se combinó el hardgroove con el trance, las vocales de remember con el schranz antiguo y los tracks emocionales con otros más cañeros. Por poner una pega, en alguna ocasión hubo un descuadre de temas provocado por saltos de aguja pero, tiró de galones y resolvió de manera magistral creando sonidos aún más agradables. Además este set será recordado por la lluvia que caía a raudales pero nadie se movió de al pista. Es más muchos salimos a bailar bajo el aguacero y con el closing de ‘Poem Without Words‘ x ‘La Linea de la Vida’ el Aquasella vivió uno de los momentos más mágicos de la edición. Simplemente, gracias Héctor y te esperamos el año que viene, ojalá cerrando…
Hablando de cierres, no podemos dejar de mencionar el mítico final de Aquasella, que, como es tradición, estuvo a cargo del DJ que ha cerrado el festival durante 27 ediciones: DJ Pepo. Esta vez, el momento fue aún más especial, ya que además de regresar al Open Air tras un año de ausencia, lo hizo acompañado de uno de sus grandes compañeros de batalla, Cristian Varela.
El set estuvo lleno de energía, con una mezcla de techno, groovy techno y hardgroove, incluyendo temas como ‘Kreck’ de Speedy J (Gonçalo M Remix), trance, e incluso toques de acid con ‘One Night in Hackney (Regal Remix)‘. La compenetración entre ambos DJs fue evidente, con momentos destacados que incluyeron los característicos cortes de DJ Pepo, scratches, y algunos tracks en vinilo, que luego fueron regalados al público por el propio Cristian Varela.
Antes de acabar la crónica destacaremos el gran desempeño de la organización a nivel de seguridad y buenos tratos tanto con los profesionales como los asistentes. Pocas colas en baños y barras que funcionaron a la perfección con gran limpieza, grandes gestiones de las aglomeraciones al acabar cada día del festival y muy pocos o ningún problema en las pistas de baile. Además, nosotros vivimos la experiencia en el camping donde la actitud de los asistentes fue bastantante notable y fomentó el buen rollo y el amor por esta música.
Por todo esto, mil gracias Aquasella, este año te dejamos El Prau lleno de recuerdos y de momentos y al siguiente que no te quepa duda que volveremos a bailar en tus tierras y a disfrutar de tu música y sobre todo de tu ambiente. Y como vosotros mismos cerrasteis el after del último día, solo nos queda dejar este mensaje
MUSIC IS THE ANSWER
Sin duda Aquasella nos ha vuelto a dejar con un grandísimo sabor de boca. Hemos visto lo bonito que es que la música una a la gente, que las comunidades confluyan y que el buen rollo y los distintos ritmos hayan hecho de Asturias la capital nacional del techno y de todas sus variantes. Hemos convivido durante cinco días en la naturaleza, purificándonos en el río Sella y disfrutando al máximo de artistas y compañeros de baile que lo han dado todo, hemos tenido un trato muy grato tanto a nivel profesional como de mero asistente al festival y podemos volver a reafirmar que el sentimiento que comenzó en una pequeña rave en 1997 pervive ahora (con algún cambio generacional como es lógico pero con las mismas ganas de disfrutar y la misma ilusión que antaño).