La productora madrileña dejó su nombre grabado en letras de oro en el olimpo del hard techno con un evento que quedará para los libros de la industria musical madrileña
Blackworks está viviendo la época más dorada de su corta carrera y sin duda lo que ocurrió el pasado 4 de Marzo en la Cubierta de Leganés son pruebas fehacientes de ello. Porque no es sencillo con apenas tres años de vida hacer historia y dar un golpe de tal magnitud encima de la mesa. Maginitud como la tendencia actual y el amor incondicional del público hacia un estilo que ya no es residual, si no mainstream. Que ya no es “para unos pocos locos”, si no para unos muchos ravers. Historia de la que se puede palpar y cuantificar. Blackworks Festival ll fue muchas cosas pero, vayamos un poco para atrás en el tiempo…
Blackworks nace en 2020. La productora fue conquistando lugares emblemáticos del techno en España como pueden ser las salas como La Riviera y Groove, el Hipódromo o la propia Cubierta de Leganés. Un crecimiento a velocidad relámpago, increíble pero merecido que se confirmó el año pasado con su presencia con stand propio en el Aquasella o la celebración del primer Blackworks Festival de la historia. Dos citas que, sumadas a su expansión a nivel nacional e incluso internacional hacen que Blackworks sea un lugar sagrado para los ravers nacionales y una plaza donde muchos de los artistas de primera fila quieren torear. Después de actuaciones memorables en estos últimos meses todo estaba preparado para su gran día.
Blackworks comenzará 2023 por todo lo alto con un Enero de récords
El listón estaba alto pero, con esta fecha, se han superado a si mismos. Cada vez que se anunciaba un nuevo artista crecía el hype por este show. ¡Y no es para menos! Absolutamente todos los sets que pudimos vivir fueron de talla mundial y de un nivel excelso. No en vano se colgó el sold out a casi dos meses del evento. 10.000 jóvenes dispuestos a convertir la Cubierta de Leganés en un templo de la música electrónica. Un lugar que ha visto desfilar sesiones que son historia del dance nacional. Un lugar que, sinceramente, está alcanzando Blackworks a base de hard-techno. Pero, como sabemos que estáis deseando ver como fue la noche no os haremos esperar más: ¡Vamos con ello!
Eran apenas las 6 de la tarde y la pista ya estaba medio llena. ¿El motivo? Uno de los b2b más divertidos actualmente dentro del hard-techno. Gallegos y argentinos más unidos que nunca. Un dúo que se complementa a la perfección. Por un lado Barbara Lago, quien nos sorprendió (o no) con su versatilidad a los platos y su aspecto de hechicera, y una de las caras más reconocibles de la productora, Skryption. El hispano argentino sabía donde estaba y lo que el público para el que tantas veces a actuado quería. Acompañado de su fiel chaleco antibalas, la estampa junto a Barbara era imponente pero más aún lo fue su techno.
Ambos decidieron que lo del warm up tranquilo no va con Blackworks y bombardearon la Cubierta a base de drops industriales, golpes de ácidos y melodías hipnóticas. Sin duda una actuación memorable por lo “cañera” (si tenemos en cuenta que era la que abría el evento) y, por la técnica que ambos demostraron. Aunque, si tenemos que quedarnos con un momento en concreto ese sería cuando escuchamos los primeros acordes de ‘La Línea de la vida‘ de Xque un tema histórico al que el genio argentino le ha dado una vuelta junto a JGMZ y suena genial, ¡os lo recomendamos! Ambos disfrutaron en cabina e hicieron disfrutar, el inicio perfecto para una noche histórica. Además, la sesión fue tan prolífica que escuchamos temas propios como ‘Anesthesic Love‘ pero también de artistas emergentes como ‘LSD‘ de Sancer.
Sin previo aviso, se hizo un breve silencio que fue interrumpido por los gritos y silbidos de toda la gente que llenaba el lugar. Entre las visuales emergió de la nada una figura femenina, la DJ francesa Parfait. Con el primer beat, la cofundadora de Possession (una de las fiestas más conocidas por los amantes del techno, caracterizadas por la libertad y la forma de vivir la música) comenzó su espectáculo musical. Durante el set pudimos apreciar la esencia de la artista haciéndonos vivir una experiencia colectiva llena de intensidad y pasión. Sin bajar de los 150 bpms, pudimos sentir la energía del hard-techno mezclado con un golpes de acid e incluso algún toque industrial.
El show continuaba y, a pesar de que la actuación de Brutalismus 3000 se tuvo que cancelar, la tristeza duró poco ya que, “gracias a eso” pudimos disfrutar de que los siguientes sets fueran más largos y completos. La noche caía y la Cubierta se tintaba de negro para recibir al artífice de gran parte del éxito de este “tinglado”.
Una imponente y muy cuidada introducción en la que un corazón gigante apareció latiendo en las pantallas nos demostró que Blackworks Festival 2023 contaba con una producción solo al alcance de los mejores festivales de España. Dexphase, quien demuestra día a día que se puede ser un excelente productor pero, también un Dj de altos vuelos subía a la cabina acompañado de su amigo y compañero Oguz. Dexphase estaba feliz, era su evento, su momento y quería vivirlo. Confiando los mandos de la nave al de Rotterdam aunque, dejando su sello con el tema que mejor representa a la productora ‘Blackworks‘. El set fue contundente y emocionante hasta el punto de que, los djs casi soltaron alguna lágrima. Vivimos momentos que te ponían el corazón en un puño y descargas de adrenalina agresivas gracias a los golpes del bombo retumbante y a hits mundiales como ‘GOLDEN SZN‘. Un ejemplo de que, juntar a dos artistas de ese calibre es apuesta segura, pero, si encima tienen tal nivel de sinergia el resultado es increíble. Cuando dejaron la cabina la pista era puro fuego, Dani sabía que la noche no había hecho más que empezar y se despidió de su gente con un drop interminable. Un golpe final que probó la potencia de los altavoces preparándolos para lo que les vendría a continuación. Todos estábamos ansiosos por presenciar el set que Kobosil y Clara Cuvé estaban a punto de ofrecernos. Con el sonido de los primeros compases, el público empezó a rugir en un frenesí de emociones que llenó todo el espacio.
Kobosil, con su estilo oscuro y potente, comenzó a hacer vibrar el lugar con una serie de ritmos inquietantes, mezclando perfectamente con el techno rítmico y agresivo de Clara Cuvé. A medida que el germano subía el nivel de intensidad de la música, la Dj mostraba sus dotes musicales con su estilo único. Con cada mezcla, la multitud se sumergió en un mar de emociones, sintiendo la energía que emanaba de su música..
El set fue un viaje emocional que envolvió a la multitud en una sensación de euforia y emoción sin igual. Uno de los momentos más álgidos del set y probablemente de la noche fue cuando pudimos con el hit del DJ y productor escocés Franck, ‘Hear The Sound‘. La música de los genios alemanes es un testimonio del poder y la pasión que se pueden encontrar en la música electrónica. Su talento, técnica y creatividad se combinaron en un espectáculo que dejó al público extasiado y sin aliento. La energía que transmitieron estos dos artistas fue una demostración de que la música es capaz de unir a personas totalmente desconocidas alrededor de unos sonidos que cada vez suenan más amigables para el público más joven del país.
El viaje continuaba y se acercaba uno de los momentos más esperados de la noche. Uno de los únicos de los artistas que haría un set en solitario: I Hate Models. El dj francés, considerado uno de los líderes de este movimiento, llegó pisando fuerte con sonidos muy potentes desde el principio que el público acogió entre gritos al saber que les esperaba otra hora y media inolvidable. Fiel a su estilo, nos ofreció un set muy completo. Demostrando sus galones, conectó y arrasó con toda la pista y gradas desde el primer momento.
Siendo un dj acostumbrado a cerrar varios de sus shows, en esta ocasión decidió decantarse por un estilo más melódico pero sin dejar de lado la energía que le suele acompañar. Entró pisando fuerte, con un inicio muy intenso en BPMs a golpe del sonido más industrial, que poco a poco fue, sin abandonar ese ritmo, tornándose en hard-trance. Dirigió a la perfección el set, con temas como ‘Vertical Vertigo‘ , de Peter Van Hoesen, que es ya todo un clásico en sus sets, pero pinchado, como no podía ser menos, a un mayor tempo que el tema original. El francés, aunque sin pecar de comercial, también nos deleitó con momentos de mainstream como el remix a ‘Toro‘ y el hit ‘Báilalo‘ de Spectrum que, sin duda alguna, ha llegado para quedarse y ser un imprescindible más de sus sets. Estos dos temas fueron acompañados con las “cantaditas”, ya que ambas canciones comparten las palabras “toda la noche”. Recursos que ya son una de las marca de identidad del artista
Como colofón, lanzó ritmos muy frenéticos y alegres, que el público siempre disfruta bailando. Todo ello mezclado de manera muy fluida con drops apoteósicos y momentos diabólicos que hacían las delicias del publico. Fue un set que supo estar a la altura del que nos regaló el año pasado e, indudablemente ninguno de los asistentes olvidaremos su paso de estos últimos dos años por la cubierta. ¡Esperamos que se convierta en un habitual!
En pleno apogeo entraron en escena dos de los más queridos por los habituales de Blackworks, por la propia productora y por la industria del hard-techno: Klangkuenstler y Nico Moreno. Un B2B tan poderoso como impactante y exclusivo que arrasó la pista como si de un tornado se tratara. Si con los anteriores sets múltiples móviles poblaban el aire en este no había tiempo ni para poner una linterna. La cubierta fue bombardeada con explosión de BPMs continua en las que el sonido industrial del alemán y la agresividad del francés mezclaban a la perfección.
Manos en alto, pies en movimiento y una música demencial que hizo las delicias de todos los presentes. Cada Dj tuvo su momento de gloria mezclando drops contundentes con temas propios como ‘Insolent Rave‘ o ‘Die Welt Brentt‘ auténticos himnos que destaban la locura. ¡Y eso no fue lo mejor! Estamos hablando de dos genios de tal calibre que, cada vez que atacaban la mesa se sacaban un nuevo kick explosivo.
La guinda final para poner a prueba las piernas de los asistentes era el closing de SNTS y Paula Temple. El enmascarado DJ y productor comenzó el set con una introducción suave y atmosférica, creando una sensación única en el público. A medida que la sesión iba avanzando, ambos Djs aumentaban el ritmo y la intensidad, haciendo que la multitud se moviera cada vez más rápido y más fuerte, siendo una de los sets con mayor contundencia de toda la noche, que no es cosa menor.
Paula Temple ofreció un estilo más enérgico y directo mientras que el hombre de la máscara exploró paisajes sonoros más oscuros y atmosféricos, sin perder el ritmo potente de Temple. Juntos crearon una experiencia musical única. El público no quería que la música se detuviera. Es por eso que, aunque encendieran las luces, los cuerpos sudorosos gastaban sus últimas energías en arrebatos de entusiasmo y exaltación. Agotados pero llenos de alegría, comenzamos a salir del recinto con una sonrisa en nuestro rostro.
Hablamos de una experiencia inolvidable, una celebración a la vida, la libertad y el sentimiento de comunidad. Blackworks volvió a juntar a amantes de un estilo que parecía residual y se convirtió en viral. Y lo hizo con la sensación de haber podido llenar tres plazas de toros si hubieran querido, y de que tienen cuerda para rato. BlackWorks Festival ha sido una experiencia transformadora, una noche que no será fácil de olvidar y que literalmente muchos chavales se llevarán a la tumba.
¿Queréis más? La productora no para y ahora va a llevar su formato festivalero a lugares como Bilbao (Bizkaia Arena) o Sevilla, continuará en sus salas madrileñas y pasará por casi toda la geografía española con carteles impresionantes. Además, tras su éxito en el pasado Aquasella los podremos ver con stand propio en el Monegros y, por si eso fuera poco, también llegarán al extranjero con una rave de 56h en Berlin (Club Ost) y otro stand en el Rave Island de Croacia. Si queréis repetir fiestas de este nivel o descubrir este mundo por dentro no dudéis en comprar vuestras entradas y… Recordad ¡Rave is not a Crime!
