Tomorrowland se convirtió en el primer evento en estrenar el nuevo Hero Dome de Shanghai con colaboraciones entre artistas muy exclusivas
El espectacular Hero Dome, una impresionante estructura de 100×120 metros y construida en tan solo cinco meses, fue el escenario perfecto para un fin de semana en el que la música, la cultura, la moda, la gastronomía y la tecnología se fusionaron a la perfección. Con capacidad para más de 10.000 asistentes, el recinto ofreció un ambiente íntimo y a la vez electrizante, diferente a todo lo que se había visto antes en Shanghái.
Como ya es habitual, Tomorrowland eunió a una excepcional mezcla de DJs tanto internacionales y locales, dando lugar a una serie de colaboraciones únicas y nunca antes vistas. Dimitri Vegas fue el encargado de poner el broche de oro a la primera noche con una actuación explosiva, acompañado por la superestrella china Masiwei en una aparición sorpresa que emocionó al público local.
No todo iba a ser el escenario principal. Chris Lorenzo tuvo la oportunidad de deleitar a los asistentes en el Budweiser Hall con su sonido tan característicos. DubVision, Matisse & Sadko y Third Party no dudaron en sumarse a la fiesta con un potente b3b al que ya nos tienen mas que acostumbrados. Tiger Drama, DJ Sally y Halo aportaron el talento local con sesiones llenas de energía.
La sensación belga del techno Amber Broos se unió a la leyenda china Meguru para ofrecer una actuación llena de energía que cautivó a todo el público. En un contraste mágico, Henri PFR ofreció una sesión vespertina cálida y melódica.
Don Diablo volvió a encender al público con una sesión electrizante, acompañado en el escenario por el rapero y productor GALI para una colaboración en directo exclusiva. Mientras tanto, la reina belga del techno, Amelie Lens, desató un vórtice hipnótico de golpes contundentes y potencia industrial en estado puro.
El drum & bass también estuvo muy presente en Shanghái. Andromedik fue el encargado de desatar una sesión explosiva mientras que Apashe puso en pie al público con una actuación audiovisual llena de metales clásicos, bajos profundos y poder cinematográfico.
A pesar de las estrictas normas de seguridad que presentan los recintos cerrados de Shanghái, Tomorrowland logró llevar a cabo una producción técnica extraordinaria construida por profesionales locales encargados de la escenografía, la decoración, los puestos de comida, las tiendas de merchandising y el vestuario. Estuvieron acompañados por un equipo de expertos formado por veinte especialistas belgas y holandeses encargados de la iluminación, el vídeo, los láseres, el audio, los efectos especiales y la coordinación de las diferentes actuaciones.
La magnifica idea de Tomorrowland de combinar talento y profesionales locales, un estricto cumplimiento de las normas de seguridad y un fuerte enfoque en la sostenibilidad; ha demostrado que Tomorrowland es capaz de llevar a cabo producciones de un altísimo nivel al igual que en sus localizaciones insignia. Sin duda un gran paso para seguir llevando la magia de un festival tan icónico a más localizaciones internacionales.
