La unión Klangkuenstler – España no es algo puntual, muchas veces el artista alemán ha confesado que España y en particular Madrid es su segunda casa y a nosotros personalmente nos ha explicado el cariño que tiene a esta ciudad y a la forma de vivir las raves de nuestro público. Es por eso que, cuando se anunció que una de las paradas del World Tour de Outworld (su nueva marca personal de eventos que triunfa allá donde va) iba a ser Madrid no hubo mucha sorpresa, pero sí expectación por los cielos.
Y es que, a pesar de que los precios de las entradas eran elevados, la fecha era un festivo, pero entre semana y que estar a punto llenar un pabellón de Ifema se resume en unas ocho mil personas, los seis mil ravers que allí nos dimos cita creamos un ambiente impresionante. Poniendo esto en perspectiva, que un solo artista sea capaz de congregar a tanta gente en un país que no es el suyo, nos hace ver lo que significa este pequeño alemán quien cuando aparece por una cabina asegura temblores sísmicos, emociones a flor de piel y momentos mágicos para los amantes del hard techno.
Con el schranz por bandera, un juego de luces sobrio y elegante, un sonido que envolvía casi la totalidad del pabellón y un lugar perfecto para una rave, todo estaba servido para una noche inolvidable. Pero, antes de entrar en sí en el evento, os recomendamos escuchar este EP, la última creación del genio alemán que ha dado la vuelta al mundo y representa a la perfección lo que es su música, esto es ‘Die Welt Brennt‘
La experiencia comenzó bien temprano, a las diez de la noche ya eran muchos los que se apresuraron a tomar las primeras filas y el escenario donde viviríamos una noche única y sin precedentes en Ifema. Un All Night Long es algo especial, pero, un All Night Long de la mano de Outworld es otro nivel.
Como bien sabréis, si sois seguidores del bueno de Klangkuenstler, sus eventos están enfocados a que todo el mundo disfrute al mismo nivel. De este modo, la organización preparó un escenario con cierta altura con respecto a la pista principal, pero al que podía acceder cualquier persona. Gracias a eso quien quisiera (si lograba hacerse hueco) podría vivir esa noche tan especial a escasos metros del protagonista.
Este centro neurálgico donde se encontraba la mesa estaba flanqueado, como si de un castillo se tratara por dos imponentes torres de altavoces Funktion One que serían los encargados de transportar el sonido a todos los lugares del pabellón y, siendo sinceros, excepto en algún pequeño rincón donde se perdía algo de potencia, en casi todos los puntos llegaba un sonido potente (quizá incluso demasiado). Una vez explicado el mundo en el que el alemán nos iba a sumergir, ¡vamos con nuestra experiencia!
Además de la expectación y las ganas que tenía el público, se debía al gancho que el mismo DJ había lanzado horas antes por redes sociales. El principio de la noche estaría gobernado por sonidos old school y hard groove, y así fue. Dos géneros al que suele recurrir en sus sets, aunque muy brevemente, pero que gracias a tratarse de un formato All Night Long pudieron tener más importancia.
Tras este comienzo tan acertado y con una increíble acogida del público, el alemán tiró de temas que, aquellos que hemos tenido la suerte de escucharle en varias ocasiones, sabemos que son unos clásicos casi imprescindibles en sus sets. Transicionando de estos estilos que comentábamos hacia el schranz, el protagonista indudable de la noche, sonaron algunos de los temas que mencionábamos, como ´Eins Zwei Polizei´, ´Lucifer´ y ´Alte Zeit´, este último de su propia creación. Incluso se atrevió en cierto momento, pero muy brevemente, a colar algo de hard trance, que cogió a muchos por sorpresa, pero que encajó a la perfección con el ritmo de la noche.
La fiesta continuó de la mejor manera posible, tras haber calentado la pista con ese hardgroove tan acertado, por fin vimos al Klangkuenstler por el que mucha gente había viajado hasta Ifema. Y es que, una vez salió a la luz el primer track de schranz eso fue una cascada imparable, una descarga de BPMs sin parangón que el público recibía con los brazos en alto y animando sin parar. Entre la batería de tracks que pudimos escuchar contamos varios edits y mashups que nos conquistaron totalmente, amen de tracks de su propio repertorio como ‘Hexenmeister´’Weltschmerz‘ o ‘Engelsblut‘ que, si en un set cualquiera triunfan, en un día como este fueron celebrados y cantados con alegría y emoción entre los allí presentes.
Todo el mundo estaba en su máximo apogeo y las transiciones eran puro frenesí. El hard techno retumbaba por todo el pabellón y parecía que el suelo iba a romperse en cualquier momento. Se notaba que Klangkuenstler estaba en su salsa, moviéndose al ritmo de los beats mientras el público estaba completamente entregado a su música, incluso aveces sorprendía con tracks mucho más acelarados que los originales para cumplir con el nivel de bpms o tracks remezclados tan míticos como el de la Street Parade ‘Love Freedom Tolerance‘, trasmitiéndonos a todos un claro mensaje de unión y amor que se respiraba entre todos los que allí nos encontrábamos.
Sin duda, se trataba de un festival de luces y sonidos que te hacía vibrar desde adentro, con todos los ravers bailando sin parar y perdiéndose en las melodías tan cañeras. Las luces eran alucinantes, parpadeando en perfecta sincronía con la música, creando un ambiente tétrico, muy berlinés, sacado totalmente de otro planeta. El DJ nos tenía a todos en la palma de su mano, cada vez que realizaba una transición para cambiar de tema se desataba una sensación de euforia; los beats eran tan potentes que se te metían en el cuerpo y no podías dejar de moverte. Hubo varios momentos de conexión total entre Klangkuenstler y el público, todo parecía que estaba sincronizado. Y es que aquellos que acudimos para ver al artista alemán esa noche, estábamos ahí para exactamente lo mismo: vivir una noche de hardtechno pura y dura que será díficil olvidar.
La noche ya tocaba su fin, pero el alemán no se iba a ir de Madrid sin dejar su sello bien marcado. A 30 minutos del final subió incluso más las revoluciones, combinando sus schranz clásico con un sonido retumbante, el cual, combinado con los saltos de la legión de fieles que tenía a su alrededor, fue la base perfecta para soltar el colofón final. Sin duda su producción más icónica de los últimos meses ha sido el EP que os pusimos para comenzar esta crónica y, efectivamente, ese fue el cierre elegido para acabar una noche histórica. Al sonar los primeros compases de ‘Mein Wille‘ miles de brazos se alzaron al aire y miles de teléfonos también surcaron los cielos para inmortalizar el momento . Fueron unos siete minutos increíbles (ya que la transición entre ambas ocurrió gracias a un imponente drop muy bien preparado) y ya cuando sonaron las primeras vocales de ‘Die Welt Brennt‘ Ifema se cayó por completo y se rindió a los pies de uno de los más grandes de la escena actual.
Esto es la prueba de que un solo artista puede cautivar oídos y corazones de mucha gente, de que una sola persona es capaz de crear su propio mundo y sumergirnos a todos en él. Simplemente, solo nos queda darle las gracias a Klangkuenstler, quien además de un artista de los pies a la cabeza es una gran persona, guardar todos los recuerdos de esta noche y esperar a que vuelva pronto por aquí para volver a destrozarnos ¨en el buen sentido¨ y es que, como reza el título de su EP, con este World Tour, está haciendo que el mundo arda allá donde pasa. Gracias Klangkuenstler… ¡España siempre será una casa para ti!
Aquí os dejamos unos videos del propio artista para que veáis la magnitud de este evento.