Es tremendamente difícil encontrar un festival español con mayor crecimiento exponencial que A Summer Story. El evento madrileño se ha asentado como uno de los festivales más potentes del país, y uno de los mayores referentes europeos en determinados géneros en concreto. Los motivos, en mi opinión son bastante claros: Buena organización, buen recinto, buenos precios, atención al público sobresaliente, perfecta y constante actividad en redes sociales, line-up variado, horarios lógicos… Y seguramente lo más importante, un público entregado que hace que la tercera edición haya sido, hasta la fecha, el mejor A Summer Story de la historia.
El viernes 23 de Junio era una fecha marcada en el calendario por esos miles de fans que ya tenían su entrada desde hace meses. Las 18:00 era la hora marcada en los relojes para la apertura del festival, que ya nos había anticipado mediante sus redes sociales el primer gran secreto: los escenarios.
El Mainstage, en esta ocasión nos sorprendía con un derroche audiovisual al nivel de las grandes superproducciones. con dos destacados y enormes paneles a los laterales. Burn Stage fue quizá el diseño más sorprendente, con unas dimensiones espectaculares y dos llamativas “ruedas” cargadas de luces para dar el mejor aspecto posible al escenario más variado del festival. Por último, pero no menos importante, el escenario que acogió el Extreme Camp el viernes y el Winter Stage el sábado, con dos vistosas calaveras y tres paneles centrales para las visuales.

Y es en el Burn Stage en el que primero nos fijamos al entrar, en el cual el señor Lassana se encontraba pinchando un buen set ofreciendo una gran variedad de géneros musicales y con un público, que para ser la hora que era, podía considerarse numeroso y entregado al madrileño.

Dieron las 20:00 y dos de los artistas más influyentes en la escena progressive house nacional hicieron acto de presencia en el escenario con una intro que hizo las delicias de los asistentes. José de Mara y Crusy nos ofrecieron hora y media de set (improvisada media hora adicional) de una calidad exquisita, mezclando tanto temas propios como IDs como vocales míticas. ‘Tokyo By Night’, ‘Center Of The Universe’, ‘DYWC’ o ‘LTWB’ fueron algunas de ellas, que consiguieron atraer a cada vez más público entregado a los madrileños. Como decía, pincharon media hora adicional debido a que Shapov, por unas causas o por otras (mejor no meternos en este punto), decidió retrasar el inicio de su set, que dio comienzo pasadas las 21:30. 
Eso sí, cuando el ruso por fín salió a cabina se olvidó de todo y dió uno de sus recitales característicos. Dejándonos sus dos versiones más conocidas, mezclaba temas melódicos como sus tan conocidos ‘Belong’ o su reciente ‘Some People’ donde los pelos de punta salieron a relucir mientras el público cantaba al unísono, junto con otros temas más cañeros de cosecha propia o varios de sus amigos Axwell & Ingrosso. Una hora en la que vimos como Shapov se divirtió en cabina y salió muy contento con la respuesta de los asistentes, dejando turno para los herederos al trono del progressive.

Y es que el sueño de todo asistente a un festival, sería sin duda poder elegir un artista confirmado. Estamos muy seguros de que el caso de Third Party fue así. El público se volcó por redes sociales y demostró en la pista el por qué ansiábamos ver a los británicos en Madrid. Y ellos tampoco decepcionaron. Hora y media de progressive house actual y un set donde además de energía y feeling con los asistentes, los artistas nos dejaron momentos para el recuerdo como sus habituales ‘Live Forever’ o ‘Everyday Of My Life’, y una gran exclusiva en forma de ID de lo que será su próximo proyecto (pero que por desgracia no podemos contar) y que dejó a la mayoría de los que estábamos allí presentes con una cara de incredulidad asombrosa.

En el #BurnStage era ahora turno para el Bass House, que prácticamente no tenía presencia en el festival pero que sin embargo llamaba a filas al, quizá, mayor exponente del género: Tchami. El francés “lo clavó”. Una sesión cargada de ritmo, transiciones rápidas y ni un segundo de respiro entre canciones de su sello Confession, singles propios como ‘Adieu’ (qué momentazo…) o hits más actuales como ‘Chicken Soup’ de Skrillex, ademas de varias IDs que esperamos conocer pronto.

El ritmo del Mainstage continuaba subiendo, y la actuación de Adam Beyer nos pareció una de las mejores de la noche. No es que fuera inesperado, ya que la veteranía y talento del sueco es algo incuestionable, pero es que el DJ supo mantener al público en su punto a una hora no excesivamente propicia para el techno, y siendo la antesala de la actuación de Prydz. Que recordemos, a bote pronto, temas como ‘Choo’ bajo su alias Pryda‘Run Back’ de Mark Reeve o ‘Take It Back’ de Layton Giordani (Drumcode), y un buen puñado de posibles IDs, completando noventa minutos de un gran nivel de música underground con el remix de Four Tet de su tema ‘Opus’.

Hablamos ahora de una de las gratas sorpresas de la noche. Nadie se esperaba lo que hizo. Solo existían especulaciones. Contra todo pronóstico, Willem Rebergen, aka Headhunterz, se marcó un set casi totalmente hardstyle. Lo cual era inédito en él desde hacía ya tres años. Nos deleitó con su mejor hardstyle. Puso patas arriba el Burn Stage. Si se piensa con cabeza, después de que la empresa Q-Dance anunciara ‘algo’ el 30 de septiembre con su silueta, y después de que la gente sospechara acerca de su vuelta en el Endshow de Defqon.1 el sábado (al que, ciertamente, fue), no era raro pensar que Headhunterz podría hacer, quizás, su último set con música comercial en A Summer Story. Aún así, estamos tremendamente orgullosos por haber vuelto a sus raíces, haciendo en Madrid un set casi completamente hardstyle. Enhorabuena, Heady.

Siguiendo con la línea marcado por el sueco en el Mainstage, llegó al escenario otro de los habituales en Madrid, como si de una aparición se tratase el holandés Joris Voorn salía a cabina con los primeros rayos de sol, poniendo un ritmo alto en los primeros compases del set, algo poco habituados en los últimos sets en directo que hemos disfrutado del artista. Y eso es algo a destacar, la forma en la que se adapta a cada situación y la hace suya, con un sonido propio característico y que nos enamora. Cómo es difícil acabar mejor el día, y las piernas y el cansancio ya se notaba, algunos decidimos ir a reponernos y descansar para el que sería el segundo día de festival. Y si, no nos hemos olvidado…

EXTREME CAMP
Otra de las facetas en las que A Summer Story brilló fue en su stage hardstyle. Los organizadores de este escenario se trabajaron muy bien un cartel que hizo las delicias de hasta el más crítico de los hardstylers. Contaba con elementos que satisfarían a cualquiera.
Para comenzar, teníamos a Donkey Rollers, auténticos pioneros de la escena que, aunque si bien empezaron algo pronto, hicieron un live act de una calidad extrema, rememorando viejos clásicos y tirando también del álbum que lanzaron hace un mes. Después teníamos a dos auténticas promesas del hardstye español: Stereocode y Kursez. Los primeros, con lanzamientos en los sellos discográficos X-Bone y Diffuzzion Records nos deleitaron con su potencia eufórica, poniendo lo mejor de la escena melódica hard, mientras que el segundo, Kursez, demostró por qué es el principal referente en lo que se refiere a raw hardstyle en este país, metiendo temas bastante duros y potentes en su set. Arzadous, ese DJ español del que ya habíamos hablado en algún que otro artículo, y que este año pinchará por tercera vez en Defqon.1 Australia, hizo un set precioso, lleno de hardstyle duro, y melódico al mismo tiempo, con temas de su álbum, que promete ser bestial.
Audiofreq continuaba, ya entrada la noche, sorprendiendo muchísimo a cada uno de los asistentes al Extreme Camp, pinchando un set con hardstyle, trap, dubstep, drum & bass e incluso psy-trance. Con una energía digna del mejor del los DJs, fue uno de los mejores del viernes. Le siguieron los genios noruegos Da Tweekaz, que pincharon de una forma súper divertida, con varios crowd games que hicieron de su set algo muy ameno. ¡Consiguieron que su set pareciese que había pasado en cinco minutos! LNY TNZ cerraba el sector de la música más o menos comercial en lo que se refiere al hardstyle, con un set lleno de sorpresas, aunque muy en su línea. Buen set por parte de este dúo. Incluso aunque pusieran un remix del conocido ‘Despacito’.
Crypsis, integrante de Minus Militia, empezaba el bloque raw de la noche, con una rudeza extrema, haciendo un cambio brutal entre el dúo anterior y él. Puso lo mejor de su álbum, ‘Program Hostile’, más collabs y temas nuevos de su sello, Minus Is More. Un estilo inconfundible que gustó a muchísima gente. The Beast Project, unos de los mayores representantes del raw español, pinchaban a buena hora. Esto les valió para no decepcionar al público y hacer un set ciertamente bueno, incluyendo su himno particular del Extreme Camp ‘Extreme Strikes Again’, lanzado pocos días antes por X-Raw (contraparte rawstyle de X-Bone). Después D-Sturb destrozaba el stage de las calaveras. Un chico que ha subido rapidísimamente debido a su gran calidad y el apoyo de muchos DJs de renombre como Warface o Radical Redemption. Hizo un verdadero setazo plagado de temas nuevos, collabs y kicks destructivos. El cierre hardcore con su collab con Destructive Tendencies valió mucho la pena. A las 4 AM le tocaba a Sub Sonik, de características parecidas, que también hizo una sesión raw digna de los más grandes.
Entrábamos en el bloque más duro de la noche. Minus Militia LIVE y su set, de los más exclusivos del mundo, debido a sus pocos sets al año, fue la locura infinita. Tiraron la Ciudad del Rock abajo. Con un montón de temas sin lanzar, fueron capaces de bajar al público y hacer un mosh-pit con sus fans, e incluso tirarse a nadar sobre la gente, al más puro estilo de una estrella de rock. Media hora que supo a poco, pero que si llega a ser más, nos mata a todos. AniMe les seguía, siendo este el primer set de hardcore puro, con lo mejor del género en su variante italiana. Una de las mejores DJanes del mundo, sin duda. Después iba uno de los sets más esperados por los fans del hardcore. Javi Boss y Juanma iban a pinchar juntos en su formato ‘Cara a Cara’ por primera vez fuera de Central Rock, discoteca hardcore situada en Almoradi, Alicante. Fue un set realmente bonito, y potente, destructivo, al mismo tiempo.
Y terminábamos con Angerfist. Si conseguiste quedarte hasta este set, te damos la enhorabuena, porque no fue algo, ni mucho menos, fácil. Un set de hora y media que destrozó. Arrasó con todo a su paso. La furia del número 46 de DJMag, se puso en evidencia nada más comenzar el set. Ya de día, fue una forma más que perfecta de terminar el viernes. Eso sí: las agujetas del día siguiente no fueron pocas.

El sábado lo comenzamos en el Natas Records Stage con Beauty Brain quienes nos trajeron una buena dosis de trap, dubstep y moombathon, temas originales y temas muy conocidos, su remix de ‘Bangarang’, su mítico tema ‘Veneno’ o ‘Danger’ junto a Ms Nina. Un buen inicio de día el cual lo continuamos con Garabatto que apostó más por future house y electro. Escuchamos sus últimos estrenos, como ‘Send Nudes’ o su remix de ‘2U’ de Justin Bieber junto a David Guetta. También nos trolleó en el momento ‘Turn Down For What’ en donde nos sorprendió con ‘Mi Gran Noche’ de Raphael.
El reloj marcaba las 22:00 y el cielo comenzaba a oscurecer, era el momento de recibir a unos de los “artistas residentes” de A Summer Story más queridos por el público español. Dimitri Vangelis & Wyman volvían por tercera vez consecutiva al festival y lo hacían con una nueva intro y mucha música que ofrecer. Hora y media de set en el que pudimos escuchar de todo (literal), y es que los suecos nos dejaron algo desconcertados al incluir en su set algunos temas de bass, bigroom y géneros parejos, algo que gran parte del público asistente no esperaba y que causó una ligera decepción. Aún así, no faltaron sus grandes producciones como ‘ID2’, ‘Survivor’, ‘People Of The Night’, ‘Horns’, ‘Legacy’ o ‘Grizzly’, además del momento álgido del set con ‘Payback’ y el ya habitual sit down del público. 
Sin duda uno de los platos fuertes llegaba a las 23:30, Tom Staar b2b Kryder. Los británicos saben que son muy queridos en nuestro país y más en A Summer Story. Un público entregado no paró de bailar todas las mezclas de estos dos grandes artistas, un set en donde esperábamos tener algo de más presencia del sello Cartel Recordings pero no fue así, cosa que decepcionó a algunos asistentes. Aún así, un genial set en donde pudimos escuchar temas como ‘MTV’, ‘Barricade’, ‘Apocalypse’ o ‘Mistakes’, cerrando con un remix del mítico tema ‘Domino’ de Oxia.

Tras el espectacular set de los británicos llegaba el turno de otro dúo bastante esperado por el público madrileño, y es que se trataba de su primera vez en la capital. Sunnery James & Ryan Marciano venían dispuestos a mostrarnos su ‘Sexy By Nature’ show y vaya si lo hicieron. Los holandeses hicieron bailar de lo lindo al respetable con sus ritmos tribales, pinchando temas como ‘Horny Bounce’, ‘Karusell’, ‘Drums Of Tobago’ o ‘The One That Got Away’, además de su nueva ID junto a Armin Van Buuren, que aún está por anunciar. Muy buen sabor de boca con esta actuación, tanto para el público como para ellos, tal y como nos comentaron tras su set.


Las dos siguientes actuaciones del Mainstage son las que, por lo que hemos podido leer en redes sociales, más diversidad de opiniones han arrojado. Hablamos de los sets de Kaskade y Nicky Romero. En nuestra opinión ninguno de los dos decepcionaron si tenemos en cuenta el estilo que vienen marcando en sus últimos releases y sets. En el caso del americano, primera vez en Madrid y primer festival en España, su set fue una mezcla de estilos considerable, algo que quizá no acabó de enganchar ni a los amantes del progressive (multitudinarios en ese stage ese día) ni a los seguidores del artista. Desde su último lanzamiento con Deadmau5 a vocales de Ed Sheeran y Chainsmokers, pasando por bastante Bass House, Future House y pizcas de Big Room. Un popurrí quizá demasiado extremo pero que para los que no esperaran mucho del artista o no fueran demasiado “entendidos”, sin duda les haría disfrutar.
En el caso de Nicky Romero, un habitual ya en nuestro país, si bien está claro que hay que reconocer que el artista es cada vez más comercial (esta palabra no tiene porque significar algo malo), tampoco podemos negar que su sesión del sábado fuera “aceptable”. De Nicky no esperábamos grandes momentos, ni tampoco muchas IDs o momentos sorprendentes, y partiendo de esa base el set hizo disfrutar a la gran mayoría del personal. Canciones como ‘Ready To Rumble’, ‘Novell’ o el épico ‘Reload’, siguen funcionando a la perfección en la pista y el holandés lo sabe. Sin embargo, y como punto negativo, creemos que el artista debería actualizar su biblioteca de ‘acapellas’, ya que ‘Firestone’, ‘Runaway’, ‘Faded’, o incluso ‘Tokyo By Night’ (aunque esta última sigue poniendo los pelos de punta) nos parecen algo desfasadas ya.

Llegaban las 5.30 de la mañana y la hora de uno de los platos fuertes de la tercera edición se acercaba. El sueco Steve Angello llegaba a Madrid con el hype de presentar por primera vez en España algunos de sus nuevos temas del que será su segundo álbum de estudio #AlmostHuman. Tras su actuación estelar en Coachella, las ganas de todos sus fans de ver al boss eran aún mayores que el pasado año. Su nueva intro nos daba la bienvenida y las visuales nos hacían ver que íbamos a vivir algo grande, #IWillRejoice. Temas míticos como ‘KNAS’, ‘SLVR’ o ‘GODS’ se intercalaron en lo último que ha salido por su sello SIZE Records, ‘Make Love (CYA Remix)’, ‘Stellar’, ‘Generation’…todo un arsenal que no nos dejó ni un respiro. Así llegamos a los dos últimos y unreleased temas. Sentimientos a flor de piel, miradas que lo decían todo, e incluso lágrimas cuando sonaron ‘Break Me Down’ y ‘Feels Like Heaven’, toda una experiencia sensorial la que provocó estas últimas notas junto a un precioso amanecer.

Otro set que generaba alguna duda pero que cumplió con creces fue el de Armin Van Buuren. El veterano holandés volvía a A Summer Story tras una aparición estelar en 2015 y para esta ocasión era además el encargado de cerrar el Mainstage del festival con nada menos que dos horas de set. Puede que para muchos DJs sea complicado mantener una “linea” y una correcta progresión cuando hablamos de sets de ciento veinte minutos, pero para Armin esto es “el pan de cada día”. El productor tiró de experiencia y deleitó a los todavía miles de fieles un set de notable alto y donde predominó ese estilo del que nunca debió separarse tanto: El Trance.

Hemos dejado para el final, pero no menos importante, uno de los mayores atractivos del festival. Oro Viejo congregó, como ya es habitual en el festival, a una gran afluencia de público de todas las edades (aunque predominando, como de costumbre, las generaciones más veteranas en esto de la música), que se agolpó en el Burn Stage desde el inicio de esta fiesta a eso de la 1 de la mañana.

El encargado de abrir Oro Viejo fue Iván Corrochano, aunque no fue hasta las 2, cuando empezó DJ Neil, cuando pudimos pasarnos por esta gran fiesta a deleitarnos con la música remember que nos ofreció. Tras una espectacular intro en la que pudimos escuchar grandes temas como ‘Lethal Industry’ de DJ Tiesto (el antiguo, no el de ahora) o ‘Poem Without Words’ de Terminal, el capo de Loca FM hizo disfrutar al respetable con una sesión de gran calidad pinchando algunos temas míticos como ‘Fly Away’ de Starsplash ‘Are Am Eye’ de Commander Tom.

Tras Neil, el italiano Mauro Picotto tomó las riendas de los platos para hacer el warm up de la que sería la sesión de la noche, la de DJ Nano con la actuación especial de Kate Ryan. Qué decir de DJ Nano, uno de los mejores DJs españoles que desde la primera edición de A Summer Story ha conseguido hacer bailar a miles y miles de seguidores con su movimiento Oro Viejo y en esta edición volvió a pasar lo mismo aún coincidiendo con artistas como Nicky Romero, Steve Angello o Armin Van Buuren. La primera media hora del set lo compartió con la mítica cantante francesa Kate Ryan y pudimos escuchar temas como ‘Désenchatée’ o ‘Ella Elle L’a’, un auténtica vuelta a la música de hace 10-15 años. Continuaba sin Kate Ryan afrontando más de 3 horas de sets, bueno mejor dicho 4 por que el propio Nano no quiso parar hasta el cierre del festival. Todos los allí presentes bailaron hasta las 9 de la mañana temas tan míticos como ‘Let The Light Shine In’ o ‘Lover Why’¡Hasta el año que viene Oro Viejo!

En definitiva, y para no alargar mucho más esta crónica, concluiremos calificando con un sobresaliente en general y dando nuestra más sincera enhorabuena a este gran festival, que en su tercera edición se ha consagrado como uno de los más grandes de España y parte del extranjero. No tenemos ni una sola pega y en redes sociales todo lo que hemos visto son buenas palabras, por lo que en nuestra humilde opinión podemos calificar A Summer Story 2017 como un rotundo éxito. Gracias a toda la organización y a todas las personas involucradas en que el fin de semana del 23 y 24 de junio haya quedado grabado en nuestras retinas por mucho tiempo.

Adrian Oller
Cofundador y redactor. Melómano, leonés y obseso de las cosas bien hechas. Imposible encasillarme en un sólo género. “Si quieres llegar rápido, camina solo. Si quieres llegar lejos, camina en grupo”