La salida del Reino Unido de la Unión Europea afectará a la industria musical a partir de 2021
Reino Unido (UK) no pertenece oficialmente a la Unión Europea (UE) desde el 31 de enero de 2020 como consecuencia del famoso Brexit, un proceso que también traerá consecuencias para los eventos de música. No obstante, los efectos de su salida no serán efectivos hasta 2021, ya que existe un período de transición durante este año para negociar los nuevos términos de la relación entre la UE y UK mediante un acuerdo comercial.
De esta manera, se acaba la libre circulación de bienes y personas por el territorio europeo y esto supondrá un importante incremento de costes económicos y dificultades añadidas: Visados, Seguridad Social aplicable, tasas aduaneras, etc. Asimismo, el Brexit pone en riesgo protección a los creadores perseguida por la Directiva de Copyright. Por ejemplo, antes una banda de UK no tenía que solicitar visado para tocar en España —y viceversa—, puesto que le bastaba con un certificado A1 para mantener su alta en la Seguridad Social británica y no tenía que declarar en aduanas sus instrumentos o merchandising. A partir de ahora esto cambia.
Exigencia de visados
El acuerdo comercial entre UK y UE debe resolver la exigencia de visados en las fronteras, ya que de lo contrario, a partir de 2021 ya no será suficiente con presentar el pasaporte. Vista esta incertidumbre, la Unión de Músicos británicos ha iniciado una campaña para solicitar a sus representantes políticos la negociación de un Pasaporte de Músicos o Pasaporte Cultural que elimine la exigencia de estos obstáculos burocráticos.
En el caso de España y según la normativa de extranjería, los artistas que vienen a actuar no necesitan permiso de trabajo si no realizan más de 5 conciertos continuados o 20 en seis meses, pero sí un visado de artistas. Es un trámite en el consulado español del país en el que reside cada artista que nos ha generado dificultades con los plazos y documentación al tratar con muchos clientes no europeos.
Seguridad Social, impuestos y aduanas
Con el Brexit, el acuerdo comercial debe contemplar el mecanismo para mantener la aplicación de Seguridad Social de origen cuando se viaja para dar un concierto, ya que sino las bandas británicas que vengan a tocar deberán darse de alta y cotizar en España. Esto supone un trámite administrativo complejo y lento, además de un coste extraordinario por la duplicidad de cuotas de cotización tanto en el país de origen como en el del concierto.
Por otra parte, al salir de la UE, el desplazamiento de materiales por la frontera británica ya no tendrá régimen de IVA como una operación intracomunitaria y quedará sujeto como importación. Esto implicará un control aduanero sobre los instrumentos, equipo musical y técnico con el que los artistas viajen, con la obligación de cumplimentar el cuaderno ATA para evitar pagar tasas y acreditar que dicho material no se ha vendido durante el viaje. Por su parte, el merchandising sí se comercializará durante los conciertos, por lo que deben liquidarse derechos aduaneros.
Otras consecuencias
Además de la Directiva de Copyright, que afectará principalmente a artistas independientes y sellos discográficos pequeños, existen otras implicaciones del Brexit en la escena musical. En cuanto a los seguros de salud, la tarjeta sanitaria europea dejará de ser aplicable en UK y será necesario que los artistas salgan de gira con un seguro médico privado. En relación a los vehículos, para que una banda de un país perteneciente a la UE circule por este territorio con su furgoneta, por ejemplo, deberá solicitar la “Green Card”, un certificado internacional de seguro de responsabilidad civil de vehículos terrestres automóviles. Además, las personas con licencia de conducir británica deberán validarla con un estado de la UE.
Fuente: Sympathy for the Lawyer